En el ingreso a Latacunga, en el límite con Saquisilí, dentro de los terrenos de la Brigada de Fuerzas Especiales Patria, se construye desde finales de 2012, el Centro de Rehabilitación Social Sierra Centro Norte. El Gobierno invierte en esta obra $ 46’580.976,49.

La infraestructura se levanta en un sector deshabitado, pues en los alrededores apenas existen 4 construcciones particulares: una gasolinera ubicada a 200 metros; 2 casas de una planta, a 150 metros; y una residencia con una ferretería como negocio familiar, a 70 metros. Es decir, los vecinos de este recinto carcelario no superan los 10.

Según César Campaña, dueño de la ferretería cercana a la cárcel, los moradores ya se resignaron a que se edifique la cárcel.

Esperan con expectativa que les traiga algún beneficio, aunque todavía no tienen claro qué negocio podrían montar.

Campaña abrió su local hace 2 años y así se mantiene. Todavía no decide si al terminarse la nueva infraestructura, que reemplazará al expenal García Moreno, continuará con este emprendimiento o lo sustituirá por otro más rentable.

Lo que sí tiene claro es que no teme ser el vecino más cercano de este sitio, que se prevé albergará a cerca de 4.000 personas privadas de la libertad, tanto hombres como mujeres.

“En el Ecuador hay otras instituciones penitenciarias que están en medio de ciudades y no pasa nada”, reflexionó.

A Delia Musso, habitante de la zona, tampoco le asusta el inminente arribo de personas que infringieron las leyes.

Más bien al momento le está sacando provecho, pues 30 obreros que diariamente trabajan en la obra, almuerzan en su improvisado restaurante.

“Como esta es una de las pocas casitas que hay cerca, los obreros me propusieron que hiciera almuerzos y vendiera colas y galletas”, explicó la mujer, quien ahora cuenta con una modesta tienda.

A Musso le han llegado varias propuestas para que venda su terreno con el objetivo de construir despensas, bazares y centros comerciales. Los potenciales compradores son ecuatorianos y extranjeros.

Sin embargo, la mujer se niega y aduce que es una herencia de sus progenitores, pese a que no cuenta con agua potable ni alcantarillado. Acotó que los negociantes buscan a los dueños de otros terrenos para hacerles las mismas propuestas.

Por el momento, no se realiza ninguna construcción aledaña.

“Todavía no se ha tratado dentro del Concejo una ordenanza que regule el uso del suelo. Es un tema delicado”, dijo el concejal Washington Ocaña.

Comparado con otros años, el sector ha mejorado su vialidad. Antes la Panamericana era de 4 carriles y hoy es de 6.

Además, se asfalta y amplía la vía de 5,7 kilómetros que conecta la entrada de Saquisilí con el barrio La Calera (Latacunga). La obra presenta un avance del 60%.