Hornado, papas con cuero, chocolate con empanadas de queso, y el delicioso Llapingacho, son los platos típicos que los sufragantes ambateños degustan en esta jornada electoral.

En la esquina de las calles Cevallos y Quito, en el centro de la ciudad, desde muy temprano doña Marina Arce como en cada comicio electoral armó su puesto de venta de comidas.

“Mientras para algunos candidatos esta ocasión será triste en caso que pierdan, y para los triunfadores un día memorable, para mi es una oportunidad para generar recursos económicos. El plato más demandado es el Llapingacho, platillo insigne de la urbe; 5 candidatos a alcaldes de Ambato se acercaron a mi puesto, y aproveché para solicitarles en caso de ser electos que no endurezcan las leyes contra los vendedores informales y ofrezcan alternativas económicas para este grupo de personas”, dijo.

Esta especialidad está valorada en $5; no muy lejos de esta esquina está la Unidad Educativa Luis A. Martínez, donde sufragaron al menos 8 candidatos a alcaldes de Ambato y a prefecto de Tungurahua. “Otra de las delicias criollas que en esta jornada se ofrece es el chocolate con empanadas de queso. No solo en la mañana, sino a cualquier hora del día; muchos de quienes vendemos comida este día trabajamos en los mercados urbanos, por lo cual pedimos a las nuevas autoridades faciliten los trámites para que los vendedores ambulantes puedan ingresar a los puestos vacíos que hay en la Red de Plazas y Mercados de la ciudad, pues es penoso verlos ejercer el comercio a sol y aguas y en medio de operativos agresivos”, señaló Lorena Vascones, vendedora de comidas.

Cerca de allí hay al menos 5 unidades educativas que son recintos electorales, entre ellas colegio Bolívar, escuela Pedro Fermín Cevallos, La Providencia, y Juan Montalvo.

El precio de cada una de las especialidades gastronómicas antes mencionadas fluctúa entre $ 2 y $ 6. Mientras avanza la tarde y el cielo se torna gris en Ambato, en los puestos de venta de platos típicos además ofertan a los sufragantes gorras, paraguas, chubasqueros, guantes y más prendas de vestir que mitiguen las bajas temperaturas que a esta hora se siente en el casco urbano. (I)