Ley sobre antenas de telefonía móvil en análisis
La Comisión de Higiene y Medio Ambiente del gobierno municipal de Ambato se reunió ayer en la sala de sesiones del Concejo Cantonal, para hacer una revisión de la ordenanza que regula la implantación y funcionamiento de las estaciones radioeléctricas y de servicios móviles de radiocomunicaciones.
La finalidad de esta revisión es normar la instalación de las antenas de comunicaciones celulares en sitios adecuados y de forma técnica, prevenir el impacto visual y establecer los montos de pago por el sitio donde serán instaladas.
Este tipo de estaciones base celular se puede identificar a gran distancia por las antenas en forma rectangular, de color blanco o gris, instaladas en el tope de una torre. En algunas ocasiones, las antenas se pueden colocar en estructuras, tales como las paredes de los edificios.
Tras ello, las operadoras de servicio celular deberán regular sus estaciones conforme lo establece la ordenanza municipal.
“Esta ordenanza ya fue aprobada con anterioridad en el seno del Concejo Municipal y actualmente, estamos haciendo una revisión final para, mediante un informe, presentarla en la próxima sesión para su aprobación definitiva”, manifestó el edil Patricio Mosquera.
Según el artículo 6 de dicha ordenanza, queda prohibida la instalación de las antenas en ventanas y balcones; monumentos históricos y en áreas arqueológicas no modificadas o áreas protegidas.
El concejal Mosquera señaló, además, que el punto central de esta reunión fue definir los lugares donde se colocarán las antenas de telefonía, más no para regular la implantación de las estaciones radioeléctricas de las diferentes empresas de telefonía móvil.
Según la ordenanza, 40 metros contados desde la calzada es la altura que debería tener una antena de esta clase, debidamente mimetizada para que no exista una afectación visual a la colectividad.
A esta ordenanza se sujetarán las personas naturales o jurídicas, nacionales o extranjeras, públicas o privadas, denominadas operadoras, que cuenten con los respectivos títulos habilitados emitidos por la Secretaría Nacional de Telecomunicaciones.
Se estima que en el cantón Ambato existen aproximadamente 100 antenas de telefonía celular. Las emisiones de estas antenas son del tipo no ionizante; es decir que no afectan a la salud de los seres humanos.
Sin embargo, en la población aún existe desconocimiento sobre los efectos de la instalación de este tipo de antenas y ven con reserva su colocación cerca de las viviendas o lugares de trabajo.
Carina Cevallos, habitante del centro de la ciudad, opinó que “la implantación de antenas cerca de viviendas, afecta a la salud. Se debería llevar esta clase de antenas y estaciones de teléfono fuera de la ciudad, a lugares donde no tengan contacto con la gente, ya he oído que provocan dolores de cabeza, baja de las defensas e inclusive cambios de ánimo”.
Esa opinión la comparte Cecilia Moya. “Aunque digan lo contrario, las ondas que transmiten estas antenas seguro afectarán a la salud. Se debería hacer un estudio de la situación de la gente que convive con esos aparatos, si desarrollan ciertas enfermedades, para determinar si en verdad afectan o no a la salud y en qué medida”, afirmó.
Mosquera sostuvo que ese tipo de temores de la población se basa en la falta de información acerca del tema. Pero que se ha comprobado que la instalación de estas antenas no involucra ningún riesgo para la salud.
“Muchas veces es más peligroso llevar el celular en el bolsillo o en el cinturón antes que estar cerca de la misma antena. Existen estudios internacionales y especializados en el tema que desmienten esos miedos que la gente tiene con respecto a las bases”, afirmó.