El Tungurahua, uno de los 4 volcanes activos del Ecuador en la actualidad, inició su más reciente proceso eruptivo en 1999.

Desde ese año la expulsión de cenizas, bramidos, emisión de rocas incandescentes y la actividad sísmica ligada al movimiento interno de flujos no han cesado.

Este comportamiento ocurre en lapsos de 2 meses, seguidos de  90 días de relativa calma. Pese a esto último, las afectaciones por los ‘caprichos’ del coloso son grandes en varias zonas de 2 provincias.

Entre ellas Hualcanga, El Guanto, El Guasmo, del cantón Quero; Huambaló, Huambalito y Pillate, en Pelileo; Alobamba y Quinchicoto, todos estos en la provincia de Tungurahua.

En la vecina jurisdicción de Chimborazo, los sectores más dañados por la ceniza volcánica son Palictahua, Cahuají, El Manzano, Puela y otros.

En ambas provincias las plantaciones de papa, haba, arveja, maíz y demás productos agrícolas, cada vez que el Tungurahua se reactiva, son calcinadas por espesas capas del material.

Esto ha causado grandes perjuicios a los comuneros, muchos de los cuales han decidido mudarse a ciudades cercanas, cambiar de actividad y diversificar las siembras.
Es el caso de Quinchicoto, única parroquia del cantón Tisaleo, ubicado a 35 minutos de la capital tungurahuense.

En este lugar el comportamiento de la ‘mama’ Tungurahua, como los lugareños llaman a la montaña, modificó, hace 12 años, la matriz productiva, seguida al pie de la letra por décadas.

Descripción del lugar

Quinchicoto es una pequeña población enclavada en la cordillera de los Andes ecuatorianos.

Allí viven unas 1.300 personas. Esta cifra representa el 30% de la población total del cantón. La localidad es conocida a escala regional y nacional por su extensa producción de granos, cereales, verduras, hortalizas y legumbres.

Desde la época colonial en Quinchicoto se cultiva papa, melloco, mashua, zanahoria, camote, oca y otros tubérculos de climas fríos.

Al lugar se puede acceder por 3 vías. La primera está a un costado de la carretera Ambato-Riobamba, desde donde se puede apreciar varias elevaciones de las estribaciones andinas.

Entre ellas los Llimpes, el cerro Puñalica y el imponente Carihuayrazo. En el kilómetro 23 de esa carretera está el segundo acceso, desde el cual se divisan los extensos y verdes prados que alimentan a miles de vacas, toros y terneros.

Dos kilómetros más adelante se encuentra la tercera entrada, la cual es la favorita de los visitantes, pues allí existen varias tiendas donde se oferta gran variedad de helados y dulces de leche.

Etimología del nombre

Quinchicoto se ubica a una altura de 3.295 metros, lo que favorece en gran manera a la crianza de diferentes razas de ganado vacuno, entre ellas Holstein y Brown Swiss, todas productoras de leche.

Pese a que el significado del nombre del sector no está muy claro, según ancianos del lugar la palabra Quinchicoto significa ‘monte de los espías’.

El fascinante paisaje andino, lagunas, senderos ecológicos y huertos frutales son algunos de los atractivos naturales del lugar.

Francisco Benavides, agricultor de 90 años, recuerda que su abuelo le contó una historia que constituye la principal hipótesis sobre el origen de la denominación de la parroquia.

“A diferencia de otros sectores que durante la colonización sirvieron de refugio para indígenas rebeldes contra el imperio español, Quinchicoto se caracterizó por ser uno de los vergeles más grandes y productivos de la región. Tras varios intentos de derrotar al ejército ibérico, que patrullaba las  mañanas y tardes para evitar amotinamientos, un grupo de Panzaleos montó su cuartel en la cima del cerro Puñalica. Por esta razón se llamó al lugar monte de los espías, presumiblemente en Runa Shimi, el idioma predecesor del kichwa”, explicó.

Desde entonces el punto fue bautizado con este apelativo, el cual también es conocido por ser un gran  refugio de flora y fauna, poseer impresionantes miradores y sobre todo una extensa reserva de fuentes hídricas, de las cuales se toma el líquido para varios sistemas de agua potable y riego en la provincia.

Su cercanía al nevado Carihuairazo, uno de los más grandes e imponentes del país, convierte a Tisaleo en paso obligado de reporteros gráficos, periodistas y aficionados a la fotografía.

Es así que varios equipos de canales mundiales, como BBC, CNN y Televisión Española, han realizado reportajes y grabaciones a los pies del cerro y en las decenas de lagunas que lo rodean.

“Los equipos periodísticos suelen llegar entre abril y mayo con el fin de filmar las noches estrelladas que se pueden observar en varios puntos. En estos meses la intensidad de las lluvias ya han disminuido, dejando el cielo completamente despejado, lo que facilita la observación de estrellas y uno que otro cometa”, aseguró Miguel Zabala, fotógrafo ambateño.

Cambio de la matriz productiva

Raúl Padilla, presidente de la Junta Parroquial de Quinchicoto, explicó los pormenores del cambio de cultivos y adopción de la producción láctea por parte de los comuneros.

“Hace 16 años la ceniza volcánica calcinó las plantas de papa, haba y zanahoria. Esto perjudicó económicamente a muchos agricultores, quienes decidieron no abandonar sus tierra y desarrollar estrategias  para el desarrollo”, dijo Padilla.

Tras varias reuniones con técnicos agropecuarios, los lugareños se dieron cuenta de que el material  por una parte afectaba a las siembras, pero por otra nutría el suelo y lo limpiaba de plagas.

“Esto motivó en 2004 a cambiar las plantas de maíz y tomate por productos que crecen bajo tierra, como la zanahoria, camote y otros tubérculos, a fin de evitar los daños del polvo volcánico”, agregó.

El éxito de las nuevas plantaciones fue tal que al día de hoy 14 de las 17 hectáreas cultivables de la parroquia tienen como principal siembra la zanahoria.

Este producto es uno de los tubérculos más fáciles de cultivar. Su fruto se puede recoger tras 3 o 4 meses, dependiendo de la clase de zanahoria.

El producto es cosechado de forma masiva, lavado en canales de riego cercanos y vendido en mercados del cantón, provincia y región, con gran aceptación.

Industria láctea

Aunque en menor proporción, el quicuyo y pasto también fueron sembrados en Quinchicoto, con el fin de impulsar la industria láctea.

Hoy en día allí se producen alrededor de 15 mil litros de leche al día. Así lo asegura Milton Castro, encargado del Centro de Acopio de la empresa Nutrileche.

“Aquí receptamos y analizamos el producto para garantizar la calidad de los derivados. Trabajamos para la empresa Nutrileche y contamos con la asesoría de los técnicos de Agrocalidad y Magap”, aseguró.

Otra de las empresas presentes en el sector es Lácteos Marlen. Su propietaria, Marlene Sánchez, asegura que cada semana allí se elaboran 600 litros de yogurt.
“Esta empresa trabaja con 300 ganaderos. Ellos entregan cada mañana leche fresca, con la que elaboramos 250 quesos frescos diarios que se entregan en Salcedo, Píllaro, Patate, Pelileo y Baños”, dijo.

Estas 2 empresas forman parte de la Ruta Turística del Tisaleo, estrategia de desarrollo a cargo de la prefectura de Tungurahua. (I)

Consumo diario del tubérculo beneficia la vista

La zanahoria es una verdura que posee grandes porciones de sustancias beneficiosas para la salud. Así lo afirma Manuel Ullauri, (foto) director del departamento de producción del Gobierno Provincial de Tungurahua y naturista.

“Además de ser un alimento con sabor, aspecto y olor muy agradable, este tubérculo posee altas cantidades de betacaroteno, uno de los antioxidantes más poderosos de la naturaleza, además de vitamina A, lo que favorece a la vista, hidratos de carbono, ácido fólico, magnesio, manganeso y fósforo”, dijo.

El funcionario destacó además que consumirla cruda ayuda a fortalecer los dientes y encías. Otra de las sustancias  que contienen las zanahorias es la vitamina E. Esta forma parte del grupo de vitaminas solubles en grasa y que han demostrado promover la función inmune, la reproducción de genes, los procesos metabólicos y las señales celulares. La dosis diaria de esta vitamina en hombres y mujeres adultos es de aproximadamente 15 miligramos, para lo cual se debería ingerir una zanahoria entera.

Componentes adicionales de la zanahoria son la vitamina C, B1, B2, B6, azúcares como la levulosa y dextrosa de asimilación directa, ácido málico, ácido silícico, inositol, diversos fitosteroles y una esencia, daucarina,  de gran poder vasodilatador, potasio, calcio y yodo.

“Por tal motivo es recomendable suministrar la verdura a niños y adolescentes en etapa de desarrollo, en diferentes presentaciones”, agregó. (I)