La producción agroecológica gana terreno en Chimborazo
La agroecología está ganando espacio en las zonas rurales de la provincia de Chimborazo, en donde diversas asociaciones y grupos de agricultores se han unido para conseguir mercados para sus cosechas. Ese es el caso de siete agricultores de la comunidad La Vaquería, del cantón Colta, quienes cultivan hortalizas y le dan valor agregado a la quinua y al chocho mediante la elaboración de helados a partir de estos productos.
“Este grupo se ha interesado en mejorar la comercialización de su producción mediante la inserción en mercados alternativos”, afirmó Vicente Parra, técnico del Fondo de la Naciones Unidas para la Agricultura (FAO) y encargado del proyecto.
Su primer contacto en busca de compradores fue la “Canasta Comunitaria” de Riobamba, organización que agrupa a 100 familias que se han unido para adquirir alimentos directamente y a un precio justo, con los que elaboran canastas de productos básicos para abastecer a familias de hasta cinco miembros.
En el primer acercamiento, los agricultores ofrecieron como muestra de sus productos helados de quinua y chocho de los que, en apenas una hora, vendieron 60.
Con este primer contacto, el siguiente paso fue la visita de varios representantes de la “Canasta Comunitaria” a La Vaquería, para verificar que la producción siga parámetros orgánicos y para establecer detalles de cómo se procederá con la venta de los productos agrícolas cada 15 días.
Cecilio Yépez, Presidente de la Corporación Agroecológica y Turística La Vaquería, sostuvo que esa es una oportunidad de incrementar su producción al tener un mercado seguro y sin intermediarios y, sobre todo, en el que valoren sus productos para mejorar su economía.
“Esto es muy bueno porque así lograremos mejores ingresos y no tendremos que estar peleando en los mercados. Allá ya es compra segura y el precio es conveniente, por lo que ganamos las dos partes”, dijo Yépez.
El sistema de la “Canasta Comunitaria” lleva más de 20 años en Riobamba y, a través de ella, grupos de campesinos pueden asegurar la venta de sus productos y los consumidores tienen la garantía de adquirir productos de calidad.
“Siempre que tenemos el contacto con una organización campesina o con nuevos productores hacemos las visitas a los sitios donde se cultivan los productos, para garantizar que sean orgánicos y que, sobre todo, con nuestra compra se beneficien los productores y no intermediarios”, sostuvo María Naranjo, integrante de la “Canasta Comunitaria”.
El costo de cada una de las canastas es de 12 dólares y en ella se incluyen frutas, tubérculos, hortalizas , legumbres y harinas.
Actualmente, los productos provienen de varias organizaciones campesinas de las parroquias de Licto y Flores, en Riobamba, y algunas comunidades del cantón Colta, ubicado a 20 minutos de la capital chimboracense.