Los bruscos cambios climáticos de  los últimos días en Tungurahua han causado varios problemas.

Desde el sábado, en los cantones Baños de Agua Santa y Patate, en el suroeste de Ambato, se produjeron tres incendios forestales de grandes proporciones, ocasionados aparentemente por las altas temperaturas.

Las entidades bomberiles de ambas ciudades trabajaron 3 horas, en cada caso, para sofocar las llamas. Uno de los incidentes ocurrió en el cerro El Pulpito, parte alta de Patate, y otro en un cerro adjunto al Parque de la Familia de Baños, ambas de difícil acceso.

Patricio Vargas, sargento del Cuerpo de Bomberos de Baños, señaló que el cantón se encuentra en alerta. “Como cada año, la presencia prolongada del sol y en otros casos descuidos humanos ponen en peligro bosques y senderos turísticos. A diario se realizan patrullajes por las zonas boscosas y las montañas que rodean el cantón, pues allí es donde más quemas ocurren”, dijo.

La más reciente se dio en el caserío Puñapí, en Patate. Este se originó la noche del domingo y tardó una hora en ser apagado.

Para Gregorio Hidalgo, gerente general de la ‘casaca roja’ de Ambato, además de la altas temperaturas, la acción humana causa decenas de incidentes con fuego. “Si bien pueden darse casos en los que restos de cristales expuestos al sol provoquen quemas, descuidos al momento de realizar fogatas y asados en zonas con vegetación seca  generan extensos incendios”, expresó.

Pero no es solo fuego, también las lluvias causaron problemas en la provincia.

La noche del sábado y domingo dos aguaceros ocasionaron que colapsara el sistema de alcantarillado del barrio El Tambo, en Pelileo.

Allí los vecinos están alarmados pues temen que futuros chubascos  aneguen el sector. “La fuerza de la lluvia fue tal que el agua se salía de los desagües. Al estar rodeado de varias pendientes, el centro del barrio puede inundarse”, dijo José López, morador.