En menos de 2 meses ocurren 3 incidentes con fuego en Ambato
A las 15:20 del martes, un poderoso estallido que se escuchó en varias zonas de Ambato, advertía a la población sobre un nuevo incidente con fuego.
Se trató de la explosión de un taller de pirotecnia, al sur de la ciudad, en el que no hubo víctimas mortales, pero sí daños en los ventanales de 4 casas cercanas al local.
De acuerdo con un rótulo que permanece a la entrada de esta fábrica de petardos, voladores y vacas locas, el local pertenecía a Vicente Sánchez.
“La detonación nos hizo pensar que se trataba de una reactivación del volcán Tungurahua, sin imaginarnos que el negocio de este vecino irresponsable explotaría” manifestó, muy enojada, Luisa Vargas, habitante del barrio Huachi La Joya.
Pese a que aún se desconocen las causas del incidente, los vecinos piden la salida inmediata de este taller, que además, es vivienda.
“No es la primera vez que estalla este lugar, por lo menos 4 miembros de la familia Sánchez han fallecido por explosiones anteriores que superan los daños dejados por la actual explosión, en ventanas, puertas y techos, de casas cercanas” afirmó un morador que prefirió no identificarse por temor a represalias.
La onda expansiva alcanzó un radio de 30 metros, en el cual más de 20 ventanales en casas de la misma cuadra y una contigua, se vieron afectados.
“El estruendo se pudo escuchar hasta la Compañía de Bomberos Huachi, ubicada a casi 20 cuadras del lugar de los hechos”, manifestó Milton Masaquiza, miembro de la ‘casaca roja’.
Byron Murillo, mayor de la entidad bomberil de Ambato, afirmó que el local no tenía permiso de funcionamiento para elaborar material pirotécnico ni para funcionar como bodega de explosivos.
“Antes que nada, para que los bomberos otorguen este tipo de autorizaciones, los locales deben estar alejados de zonas residenciales y contar con condiciones de seguridad extrema que eviten esta clase de sucesos”, señaló.
Pese a que han transcurrido 4 días desde el incidente, aún no se han determinado las causas que ocasionaron la explosión.
Población exige control
En lo que va del año, este es el tercer accidente similar en Ambato.
Esto genera preocupación en la colectividad por la falta de control por parte de las entidades encargadas de velar por la seguridad y evitar que desastres como este ocurran nuevamente.
Aún está latente en la memoria de los ambateños lo sucedido la noche del 22 de febrero cuando un voraz incendio afectó el 70% de la estructura del Centro Comercial Popular Simón Bolívar.
El siniestro consumió la mercadería de gran parte de los 770 comerciantes que hacían ferias semanales, los lunes y domingos; y, dejó, literalmente, en la calle a los mercaderes.
“La SGR, el departamento de Seguridad del Municipio y los bomberos deberían vigilar los sitios considerados peligrosos, por almacenamiento de material inflamable”, señaló Diana Calero, dirigente del barrio San Juan, cercano a La Joya.
Luis Samaniego, comerciante del mercado Simón Bolívar, expresó: “las capacitaciones en prevención de desastres y atención de emergencias, deben ser más frecuentes, para saber cómo actuar en eventos similares”. Los mercaderes optaron por instalar sus negocios en las calles para poder trabajar.
UNA FALLECIDA EN FUGA DE GAS DE LA OLMEDO
La explosión del 1 de abril, provocada por una fuga de gas en el restaurante ‘Meriendas de Marianita’, dejó como saldo 3 mujeres heridas y una fallecida, debido a quemaduras de tercer grado en más del 90% de su cuerpo. Fernanda Torres, quien laboraba como cocinera en este local, ubicado en las calles Olmedo y Castillo, centro de la ciudad, fue la más afectada por el estallido que se produjo, aparentemente, por un descuido humano.
Las otras 3 heridas, se recuperan satisfactoriamente en sus hogares, tras permanecer dos semanas en casas de salud de Ambato.
A la par, también salen del trauma emocional que dejó el accidente, con la ayuda de especialistas y apoyo familiar.
Los allegados de las lesionadas, solicitan más control por parte de los bomberos para detectar fallas en las cocinas y sistema de gas.