El sector El Guango, perteneciente a la parroquia Tingo La Esperanza, es el sector más estrecho de la carretera La Maná - Latacunga, de 137,37 km de extensión totales. Esa zona está rodeada de rocas de grandes dimensiones que están siendo minadas para permitir que las labores de la ampliación se cumplan. 

Según el plan de trabajo del Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP), la vía será de cuatro carriles  desde Latacunga hasta Pujilí y de dos   desde Pujilí hasta La Maná, sector donde está El Guango.

Fernando Corrales, fiscalizador de la obra de ampliación de la carretera, dio a conocer que la compañía Becerra Cuesta, encargada de ejecutar los trabajos, llegó a acuerdos con la Dirección del MTOP en Cotopaxi para solucionar en cierta medida la problemática generada en los sectores aledaños a causa del  cierre temporal, que se inició hace más de un mes. 

Según Corrales, la vía se  mantendrá  abierta  todos los domingos las 24 horas del día para permitir el paso desde los recintos La Esperanza, Macuchi, Pilaló, Apagua y Zumbahua hasta el cantón La Maná.

“Los domingos son feriados, la carretera se habilitará  para que los productores puedan comercializar sus productos y los consumidores adquirirlos”, explicó Corrales. 

Además, se abrirá el paso peatonal de 06:00 a 07:00 de lunes a viernes para que los niños, niñas  y jóvenes, cuyas escuelas se encuentran   antes o después del sector El Guango, puedan trasladarse a sus respectivos sitios de estudio.

De igual modo, se permitirá el paso peatonal al mediodía para que puedan regresar a sus hogares.
Corrales aseguró que la seguridad y la señalización están colocadas en todos los sectores. “Además, al momento en el que se habilita el paso, hay empleados de la constructora verificando que no vayan a ocurrir accidentes”, comunicó.

El último hecho lamentable ocurrido en este sector fue el del 21 de marzo,  cuando una piedra le cayó encima a José Romero Heredia y lo mató. Esto sucedió cuando intentaba cruzar a pie el sector  e hizo caso omiso a la advertencia de los técnicos, quienes le informaron  que había piedras que se encontraban sueltas  debido a que la mañana de ese mismo día,  se ejecutó un derrumbe programado, en el que se utilizó   dinamita para  el ensanchamiento de la carretera.

Con estos antecedentes, según el fiscalizador, se han tomado todas las medidas necesarias para no tener ningún problema durante la apertura de la vía por horas. Indicó también que de  haber la necesidad de cambiar los horarios de cierre y apertura de la vía, se coordinará con los empleados y técnicos que se encuentran en la parroquia Zumbahua (Pujilí) para que se encarguen de difundir la novedad a los demás empleados y estos a su vez a los conductores que se están dirigiendo al lugar “para que tomen las medidas pertinentes”.

“Esperamos que la constructora Becerra Cuesta termine con la obra el 30 de junio como se estableció en un principio, pues las molestias que se están generando son múltiples y los afectados son los pobladores”, mencionó Luis Arias, párroco del cantón La Maná.

Según el sacerdote,  se han visto afectadas en aspectos tales como el acceso a la salud y educación, pues hay estudiantes a los que el cierre de la vía les impide llegar hasta sus establecimientos educativos. “Además de que incomunicó a familias que ahora ya no se pueden ver con la regularidad de antes”, relató Arias.

Esta obra  cuenta con  un presupuesto  de 113 millones de dólares que son invertidos en la  colocación de una superficie de rodadura  de hormigón asfáltico, con un  espesor de  7,5 cm desde el tramo La  Maná - Apagua y 10 cm desde Apagua -  Latacunga, incluyendo espaldón y cunetas, y deberá estar lista en su totalidad en  2014.