La celebración más importante y representativa de Ambato es sin lugar a dudas la Fiesta de la Fruta y de las Flores (FFF).

Esta festividad, que generalmente se desarrolla entre mediados de febrero e inicios de marzo, recuerda la superación del pueblo ambateño tras el devastador terremoto del 5 de agosto de 1945, en el que murieron más de 5 mil personas.

Los platos típicos, huertos frutales, museos pictóricos, extensos parques y quintas de ilustres escritores encabezan la lista de atractivos para los 900 mil visitantes que durante esos días llegan a la ciudad.

Entre los eventos con mayor convocatoria están las presentaciones musicales, el ciclopaseo, la competencia atlética, la feria gastronómica, el show acrobático de la Policía Nacional y el mayor de todos, el Desfile de la Confraternidad.

En esta colorida parada participan grupos dancísticos de barrios, instituciones educativas, entidades públicas, asociaciones de agricultores y adultos mayores, entre otros, de toda la provincia y delegaciones invitadas de la región.

Durante el desfile la Reina de la ciudad recorre 25 cuadras del centro a bordo de un muy decorado carro alegórico, transporte elaborado con una gran estructura metálica decorada con productos agrícolas emblemáticos de la ciudad.

Además de ser las carrozas oficiales que transportan a esta y las otras soberanas de cantones vecinos, este elemento es la fiel representación del júbilo, emprendimiento, excelente producción agrícola y amor a la vida que caracterizan a los ambateños.

Proceso del ensamblaje

Por su delicado diseño y laboriosa decoración, la carroza se empieza a elaborar 3 meses antes de la fiesta en varios talleres del sur de la capital tungurahuense.

Trajano Flores, reconocido diseñador y artista, ha sido por más de 5 años el encargado de ensamblar el carro alegórico de la Reina.

En su taller, ubicado en el barrio Huachi Chico, se trabaja en el proyecto desde mediados de noviembre. En esta fecha el diseño de la carroza ya ha sido elaborado y está lista para su elaboración.

“El concurso de diseños se realizó a mediados de octubre de 2014. En esta fecha se eligió como ganadores a 18 de los 140 bocetos que se presentaron en la competición y que fueron elaborados por artistas locales. Ahora mismo sus creaciones están siendo terminadas y transportarán a las soberanas por la avenida Cevallos el domingo 15 de febrero de 2015”, dijo María Cecilia Cuesta, directora ejecutiva del Comité Permanente de la FFF.

Uno de los ganadores precisamente fue Trajano Flores, quien elaborará 4 alegorías cuyos nombres son Renacer, Letras en Libertad, Vivencias y Colores y Festival del Folclor. “En todas mis creaciones usaremos frutos típicos de Ambato y Tungurahua. Con esto pretendemos usar el menor número de materiales artificiales y demostrar el potencial agrícola que siempre ha caracterizado a nuestra tierra”, dijo Flores.

Las comparsas que año tras año acompañan a los carros alegóricos deleitan al público con bailes, coreografías, cantos y coloridos disfraces de personajes jocosos (foto).

En sus 10 años como diseñador y constructor de carrozas, el artesano ha elaborado alegorías para los desfiles anuales de Quito, Cuenca, Guayaquil, Puyo, Riobamba y Latacunga, entre otras ciudades.

Los componentes

Las alegorías de Ambato son decoradas con diferentes productos agrícolas, entre ellos: manzanas, claudias, peras, granadillas, duraznos y chirimoyas. Estas frutas provienen de los huertos del sur de la urbe, entre ellos el barrio Huachi Chico. Manuel Sandoval, fruticultor de esta localidad muy conocida en la región por su excelente producción agrícola, afirmó que es un honor entregar las primicias de las cosechas para engalanar la fiesta.

“Dios ha bendecido mucho esta tierra pues es fácil la germinación de frutas. Al año siguiente del terremoto nuestros padres empezaron a separar los mejores frutos para decorar las fiestas, a modo de ofrenda al Creador por haber sobrevivido a tan terrible desgracia”, dijo.

De otro lado, los cartuchos, rosas, claveles, tulipanes margaritas y otras flores usadas en la decoración de las carrozas provienen de los huertos de Izamba, Cunchibamba, La Florida y otros sectores del norte de la ciudad.

El famoso pan de Pinllo, emblema de la urbe, es también utilizado para el embellecimiento de las alegorías. “En una carroza se utiliza un aproximado de 600 piezas de pan, elaboradas en hornos de Pinllo”, dijo Ernestina Morales, panificadora del lugar.

Pese a que no son productos propios de la zona, el arroz, maní y lenteja decoran las paredes de los paisajes que se montan sobre las carrozas, tales como el centro histórico, la catedral, los mercados, museos y quintas de ilustres ambateños.

“Estos productos son traídos desde Manabí, Los Ríos, El Oro y otras provincias de la Costa. Agricultores de Ambato que migraron hacia esos lugares entregaron, como hace 30 años, sus primeras cosechas a modo de agradecimiento al Creador por un año más de vida”, dijo Lorena Martínez, ambateña.

Tres meses es el tiempo mínimo para la elaboración de estas coloridas y hermosas creaciones. Su precio, dependiendo de los materiales usados, varía entre $ 5 mil y $ 6 mil.