Dos tribus entre las posibles dueñas de casa de 3.000 años
El hallazgo de una vivienda cuyo origen tendría 3.000 años, le tomó dos años al equipo de antropólogos del Instituto Francés de Estudios Andinos.
Los científicos son Stephen Rostain, director de la investigación, Geoffroy de Saulite, y el antropólogo de Pastaza, Carlos Duche.
Este último, funcionario del Distrito de Educación y dedicado a la investigación cultural, comentó que se abrieron dos frentes de trabajo: el primero, en un área de aproximadamente 100 metros cuadrados de terreno en el sector de la Moravia en el cantón Mera; el segundo, a un costado del paso lateral, en el sector El Pambay, muy cerca de Puyo, en la propiedad de Pedro Paredes.
En el sitio intervenido, de aproximadamente 150 metros cuadrados, cuatro campesinos que cumplían labores de excavación con el asesoramiento de los antropólogos franceses, hallaron la vivienda luego de un mes de trabajo (julio 2013). “Hemos encontrado evidencias de las Malocas, construcciones grandes que existieron en tiempos precolombinos; también de postes, cuyo análisis realizado en Francia con carbono 14 determina que su origen es de 3.000 años”, indicó.
Identifican la alimentación
El análisis lítico microbiológico determina que en esa época consumían mandioca, yuca, maíz y lo más importante: el cacao salvaje de aroma.
Además, dio cuenta de que identificaron una pequeña vasija llamada (llipta) donde se limpiaba la copa que servía para los grandes rituales y caminatas de aquel entonces.
Las evidencias corresponderían a una casa ovalada, de 17 metros de largo por 11 de ancho. "La vivienda se identifica como algo similar a la de los achuar y los kichwa. La diferencia es que el fogón fue hecho con piedra”, destacó.
Para Duche lo encontrado en el sector de Pambay-Pastaza constituye una de las más grandes antigüedades localizadas hasta el momento en los países de Latinoamérica.
Todo aquello podría ser la evidencia de que en la región antes de los 3.000 años ya existieron poblaciones y habitantes precolombinos, lo que desvirtuaría la teoría de que esta jurisdicción fue colonizada por culturas que llegaron de la Sierra.
Para revalorizar el hallazgo, se prevé crear un proyecto binacional con arqueólogos del Perú, debido a que existe la presunción de que a través del río Pastaza se producía la movilidad de los habitantes de esa época. La morada sería más antigua que otras encontradas en el territorio brasileño.
Desconocían excavación
Allegados al propietario del predio donde ocurrió el hallazgo expresaron su malestar por las labores de los antropólogos, ya que no les informaron lo que estaban haciendo.
El dueño responde a los nombres de Pedro Paredes y de acuerdo con sus familiares ni al inicio ni al final de las excavaciones conocieron de los trabajos que se hacían.
El terreno lo adquirieron en 1970 y antes de estas tareas cultivaban algunos productos que ahora están abandonados.
Advirtieron que para una próxima intervención de cualquier entidad o persona, deberán consultar con los dueños. “Estos terrenos no estaban abandonados y son propiedad privada. Deben respetar”, indicaron.