Doce horas de intensas lluvias provocaron pánico en la parroquia rural Lita del cantón Ibarra, límite entre las provincias de Imbabura y Esmeraldas. El aguacero que según Pedro Mosquera, morador del sector, inició a las 14:00 del pasado jueves y terminó a las 02:00 de ayer, ocasionó más de 10 deslaves de consideración en toda la parroquia. Dos de esos aluviones sepultaron a dos comuneros de la localidad quienes perdieron la vida de inmediato.

La montaña se le vino encima

Zoilo Revelo Rodríguez de 43 años fue la primera víctima que deja el invierno en la provincia de Imbabura. Según informó Pablo Martínez, jefe de la Unidad de Policía Comunitaria (UPC) de Lita, a las 18:00 del jueves, Revelo transitaba por la comunidad de Rio Verde Bajo a bordo de su motocicleta.

“Yo estaba dentro de mi casa, pero muy asustado por el fuerte aguacero que caía. A lo lejos vi que por la carretera estaba pasando una motocicleta. De pronto escuché un estruendo que parecía terremoto y la luz de la moto desapareció. En ese momento observé que toda la montaña se había venido abajo”, manifestó Roberto Taicuz, testigo del suceso.

El jefe de la UPC de Lita informó que por el mal clima no pudieron rescatar el cuerpo del agricultor que fue arrastrado por la corriente de lodo y piedras al menos 800 metros rio abajo. El gendarme informó que el cadáver de Zoilo Revelo fue localizado a las 06:00 de ayer y con ayuda de los comuneros del lugar lograron rescatarlo de una quebrada.

Gerardo Revelo, padre de la víctima, con lágrimas en sus ojos, aseguró que su hijo era el sustento de su familia. “El con sus cultivos de papaya y naranjilla nos mantenía”, comentó el desconsolado progenitor.

Piedra aplastó a un Awa

A pocos kilómetros de la comunidad Rio Verde, un deslizamiento de rocas cegó la vida de Galo Bolívar Ortíz de 20 años. Casi de manera simultánea a la primera tragedia de la zona en Rio Verde, una piedra lo golpeó en la espalda y el cuello cuando caminaba por la localidad de Hojala rumbo a la población Awa de donde era oriundo.

Cornelio Ortíz, padre del joven fallecido, dijo que trasladaron el cuerpo durante toda la noche del jueves y la mañana de ayer hasta el centro poblado de Lita para sepultarlo según sus tradiciones ancestrales.

Poblaciones incomunicadas

Pedro Tulquizán, funcionario de la junta parroquial de Lita, dijo que por los deslaves registrados la madrugada de ayer en la vía Lita - Río Verde, más de mil habitantes de siete comunidades quedaron incomunicados. (CAT)