Hace 7 años, Ambato fue referente nacional al implementar el uso de ‘ecotachos’ en la ciudad.

Siete años después, la ciudad vuelve a ser ejemplo, al construir la primera procesadora de todo el país que convierte los desechos sólidos en fertilizantes y material de construcción.

Al momento, la compañía canadiense Anpestrid ejecutora del proyecto, edifica la planta junto a las instalaciones de la Empresa Pública Municipal de Gestión Integral de Desechos Sólidos de Ambato (Gidsa), al norte de la ciudad.

Peter Stryzga, gerente general de esta compañía en Ecuador, explicó los detalles de la iniciativa durante la inauguración de los trabajos.

“El 100% de la basura que se produce a diario en Ambato recibirá un tratamiento especial, que convertirá la materia orgánica en abonos y fertilizantes. El resto servirá como materia prima para fabricar adoquines y bloques que se utilizarán para estabilizar laderas, taludes y muros de contención”, dijo.

El vidrio, plástico, papel y cartón; añadió, serán apartados para el debido proceso de reciclaje.

Además, señaló que la elaboración de material de construcción no representa competencia para las fábricas artesanales de bloques y ladrillos, por cuanto la clase de adoquín que se fabrique será para uso industrial, y no casero.

El precio total del proyecto asciende a $ 11’500.000, con una financiación compartida entre la Corporación Financiera Nacional (CFN) y la empresa canadiense.

La obra empezó a ejecutarse hace una semana y se prevé que empiece a dar tratamiento a las 240 toneladas de basura que se produce en la ciudad cada día.

La planta constará de 2 naves, de las cuales la primera se levantará sobre un terreno de 5 mil metros, junto a las oficinas de Gidsa.

Por otro lado, el bloque administrativo, es decir, bodegas, guardería y oficinas de Anpestrid, en Ambato, se ubicará en los predios de la entidad municipal, con el objetivo de coordinar acciones conjuntas.

La procesadora dará trabajo a un estimado de 120 personas de diferentes áreas y en 2 turnos al día.

La ejecución de este plan se produce tras la convocatoria internacional que el Cabildo de Ambato abrió hace 2 años.

En este proceso se buscaba una compañía que presente un proyecto de tratamiento a los desechos sólidos, en armonía con el medio ambiente y que además dé trabajo a personas de la localidad.

Darío Mayorga Valle, gerente encargado de Gidsa, afirma que la iniciativa cuenta con todos los permisos respectivos, incluido el del Ministerio del Ambiente (MAE).

“El cuerpo de Bomberos, la Dirección Municipal de Construcción y la cartera de Estado, han otorgado las licencias necesarias para que la obra sea construida bajo los parámetros técnicos y de calidad. Queremos que esta planta se convierta en referente, no solo de tratamiento a la basura, sino también de tecnificación y aplicación de métodos innovadores a nivel internacional”, puntualizó.

Señaló que la conjunción de tecnología de punta, infraestructura amplia, apoyo al trabajo local y armonía medioambiental fueron los aspectos que el Municipio tomó en cuenta en la propuesta presentada por Anpestrid, y que la llevaron a ganar la adjudicación y ejecución.

Omar Landázuri, director del MAE en Tungurahua, afirmó que la gestión y cuidado del medio ambiente de Ambato debería replicarse en todo el país. “El hecho de conseguir una materia prima aplicable a partir de basura es muy importante para una ciudad. Creo que el manejo ecológico de cada cantón debería contemplar el monitoreo de ruidos, olores y contaminación, aspectos que determinan un ambiente saludable”.

Anpestrid es una empresa con sede en Canadá y con presencia en Europa con 6 plantas y 10 procesadoras en Canadá y Estados Unidos.

En Sudamérica, el único país donde han trabajado es Paraguay.