En la Brigada de Caballería Blindada Galápagos, en la ciudad de Riobamba, funcionaba desde hace varios años el centro de rehabilitación especial Despertar de los ángeles, que era dirigido por el Comité de Damas Voluntarias del Ejército. El Ejército prestaba el espacio  y proveía de instrumentos y personal especializado en musicoterapia, equinoterapia, hidroterapia,  psicólogos infantiles y rehabilitadores físicos, quienes asistían a los niños, niñas y adolescentes.

El centro contaba también con la colaboración de entidades gubernamentales como el Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES). Sin embargo, en los últimos días ha existido preocupación en  las familias de los 120 niños y niñas  que acudían a ese lugar a recibir terapia, debido cierre anunciado el 14 de julio, antes de salir a vacaciones.  Por esa razón quienes hacían uso del lugar se preguntan si podrán volver a él.

María N. quiere saber cuál será el destino de su hijo que sufre de paraplejia debido a una lesión medular. Él acudía hasta el centro todos los días, para que el personal le asista en su rehabilitación.

“El cierre de este lugar nos dejó impactados; no existen otros lugares que brinden esa ayuda. Colaborábamos con una mínima cantidad y el beneficio era bueno para nuestros hijos. Ahora no sabemos dónde vamos a ir o qué pasará. Es por eso que acudimos a la Defensoría del Pueblo”, afirmó.

Similar situación vive Sandra N. “Con mi hijita veníamos todos los días. El espacio es grande por lo que no solo era la rehabilitación de su cuerpo, sino de su mente. Tenía amigos aquí. La rehabilitación con los caballos (equinoterapia) le ayudó mucho. Queremos que nos ayuden para que no se cierre.

Entendemos las circunstancias de las personas que dirigían el lugar, pero que no se nos deje sin esta alternativa”, pidió.

Según Paúl Mancero, defensor del Pueblo en Chimborazo, esta decisión obedece directamente al comité de damas, pues al igual que sus esposos deben viajar a otras ciudades a prestar sus servicios y no podrían darle continuidad a esta labor. “Al ser un lugar privado no podemos obligar a nadie a seguir con este trabajo. Nuestro papel es buscar otra alternativa para que los niños que eran atendidos en el centro no dejen su rehabilitación, pues causaría un retroceso en su salud. No existe otro centro con las mismas características que ofrezca este tipo de tratamiento. Es por eso que solicitamos la colaboración de instituciones que tienen bajo su cargo este tipo de circunstancias”, aseguró Mancero.

En tanto, Valeria Cruz, directora provincial (e) del Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES),  indicó: “Los niños son la prioridad, por lo que llegamos a acuerdos que están siendo analizados.

Hasta que estos sean aprobados, los niños y niñas que acudían al lugar serán reubicados en los centros de nuestra institución. Tenemos grandes expectativas de que se continúe con el espacio Despertar de los ángeles, ya que no se puede permitir que se cierre por la gran labor que ha desempeñado.

Será paulatino y progresivo. Los espacios físicos van a ser cedidos a la institución que se haga cargo. No vamos a perjudicar a las familias, pueden estar tranquilas, pues les garantizamos el bienestar de sus hijos y familiares”. En  próximas fechas se conocerán los resultados de las reuniones.