Desde el año pasado, la empresa eléctrica cambia las redes
Chimborazo, lista para nuevas estufas
En Chimborazo, desde hace 1 año se cambian las redes eléctricas como paso previo a la implementación de las cocinas a inducción, prevista para agosto.
En la provincia existen 160 mil abonados del servicio, divididos en residenciales, comerciales e industriales. El cambio de cocinas a gas se aplicará en el sector residencial, es decir, para 120 mil abonados. De esta cantidad, 12 mil ya cuentan con el equipo de medición de 220 voltios.
Joe Ruales, gerente de la Empresa Eléctrica Riobamba S.A (Eersa), señaló que hasta la fecha se han realizado las modificaciones necesarias para viabilizar el programa estatal, incluso en la aprobación de planos de construcción de urbanizaciones o casas particulares.
Enfatizó que la ciudadanía contará con un solo medidor, el cual distribuirá 220 voltios para la cocina a inducción y 110 para el resto de electrodomésticos. “No va a existir ninguna variación para el usuario, porque nuestras redes están en capacidad de proveer tal energía. Al entrar más proyectos hidroeléctricos y de energía limpia como se tiene planificado, hará que el costo de la electricidad baje”, precisó.
Con la sustitución, el Gobierno ahorrará 800 millones de dólares que cuesta el subsidio del gas.La idea de cambiar el uso del gas por electricidad goza de la aceptación de algunos ciudadanos. Guering Cevallos ya tiene el medidor de 220 voltios en su casa. “Normalmente pago de $ 10 a $ 12 mensuales por el consumo de luz y ya tengo el aparato desde hace 6 meses. No he visto ningún cambio”, puntualizó.
Sin embargo, personas que se dedican a la fabricación de artículos que funcionan con el derivado del petróleo, dijeron sentirse preocupadas ya que no saben con exactitud qué sucederá con sus negocios.
La familia Santillán tiene hace más de 40 años una empresa dedicada a la fabricación de cocinas, freidoras, asaderos y otros aparatos a gas. “Me parece bien el plan del Gobierno, pero sí nos gustaría que nos expliquen un poco más. Hasta donde conocemos, muchos dejarán de utilizar este tipo de estufas y ello bajará un poco nuestras ventas”, señaló un miembro de la compañía.
El gerente de la Eersa indicó que las cocinas a gas no desaparecerán y lo que busca el Ejecutivo, es generar alternativas para el uso del gas, “lo que buscamos son más opciones que solo el gas, para generar beneficios a los ecuatorianos, y esto no implica gastos extras a los ciudadanos”, señaló Ruales.