Técnicos de la Agencia Ecuatoriana de Aseguramiento de Calidad del Agro (Agrocalidad) mantienen bajo control el brote de la peste porcina detectado la semana pasada, en la provincia de Chimborazo.
Luego de tomar las medidas de seguridad  se evaluó y examinó a 62 cerdos para conocer si presentaban síntomas de este mal.

Los resultados de las evaluaciones  confirmaron tres días la enfermedad  en 32 animales, los cuales fueron sacrificados y enterrados bajo estrictas reglas de seguridad, para evitar cualquier tipo de contagio.

Controles en la zona

Aunque los técnicos de la Agencia determinaron que no existían más cerdos afectados, en el sector donde se dieron los primeros hallazgos (en las afueras de Riobamba), un grupo se mantiene  en cuarentena.

Esta medida impide a los comerciantes llevar a sus animales a las ferias o a los camales.
Milton Velasco, técnico de la entidad adscrita al Ministerio de Agricultura, Acuacultura, Ganadería y Pesca (Magap), expresó que la ciudadanía debe mantenerse tranquila, ya que no es cierto que esta dolencia tenga relación con la gripe AH1N1.

“La enfermedad se contagia solo de animal a animal. Los seres humanos no tienen nada que ver con esto”, afirmó.

Asimismo, señaló que la peste conlleva pérdidas económicas para los dueños de los cerdos, al tener que sacrificar a sus animales.

El especialista explicó que este mal se presenta de forma esporádica en varios sectores del país. La detección oportuna de los síntomas ha permitido que los propietarios solo sacrifiquen a algunos.

En los casos localizados recientemente, las autoridades responsabilizan al dueño de la granja, por no haber tomado  medidas  adecuadas. “Esto se debe al descuido de los propietarios que no han vacunado a su ganado contra la enfermedad”, comentó.

Además, agregó que los ganaderos pueden acceder a las campañas de vacunación  que realiza el Estado o acercarse a las oficinas de Agrocalidad, donde recibirán asesoría.
Como parte de un plan de prevención, técnicos de la entidad de control realizan recorridos por varios sectores de la provincia, para inmunizar a la mayor cantidad de animales y evitar nuevos brotes.