Uno de los proyectos turísticos más grandes e importantes del país se fortalece con el trabajo de la industria carrocera de Ambato.

Se trata de la incorporación de un servicio turístico que recorrerá los lugares más visitados de Quito abordo de un autobús tipo tranvía, que simula un recorrido en este tradicional modelo que hasta el siglo XVIII existió en la capital y en Guayaquil.

Representaciones Irigoyen Vega, renombrada empresa turística de Quito, encargó a Carrocerías Jácome, de Ambato, la construcción de esta unidad que empezará a transitar por las calles quiteñas a partir de junio.

La idea es acercar a los visitantes a sitios como las iglesias, los museos, los parques y los barrios más tradicionales.

Esta unidad, decorada con pintura roja, pese a ser un carro autopropulsado, ha sido ensamblada con  todas las características que distinguen a un tranvía, entre ellas: parabrisas de 3 ventanas, puerta lateral con rampa de acceso; techo, asientos y otras partes interiores de madera, faldón de metal bajo que oculta los neumáticos, campana tradicional en lugar de claxon y parte frontal similar a la de un autoferro antiguo.

José Padilla, principal de Representaciones Irigoyen Vega, manifestó que la primera unidad ya está terminada. “El bus modelo está listo y preparado para operar. Nos decidimos a contratar los servicios de una empresa ambateña, debido a que la industria carrocera es muy desarrollada y tecnificada en esta ciudad. Gracias al éxito obtenido con la primera unidad, con capacidad para 22 pasajeros, estamos construyendo la segunda con 8 asientos adicionales”, dijo Padilla.

El diseño del bus empezó en agosto de 2013 y el ensamblaje se terminó en diciembre del mismo año. Después de esto, el vehículo pasó satisfactoriamente la primera prueba en el centro de Quito.

Además de esto, Padilla afirma que inicialmente el servicio funcionará solo en esa ciudad y dependiendo del éxito que tenga, se podría implementar en el resto del Ecuador.

En la parte interior, lo que más llama la atención es el diseño de los asientos que, a pesar de ser de madera, cuentan con sus respectivos cinturones de seguridad, accesos individuales a las ventanas y cojines cómodos cubiertos de piel que facilitarán a los viajeros un recorrido confortable y suave.

Las lámparas y focos, ubicados en el techo, parte lateral de los asientos y pasillo decoran la unidad y aumentan la sensación de estar viajando en un verdadero tranvía.

Representaciones Irigoyen Vega es una empresa de turismo receptivo que ha operado en el Ecuador desde 1992. Sus principales clientes sudamericanos, a quienes ofrece paquetes vacacionales que incluyen transporte desde el aeropuerto hasta el hotel, hospedaje, movilización y visitas guiadas a Guayaquil, Cuenca, Manta, Riobamba, Ibarra, y Ambato, entre otras.

Luis Jácome, dueño de Carrocerías Jácome, señaló que el costo de un bus de este tipo supera los $ 80 mil. “Pese a que el valor estándar para estas unidades depende del tamaño y del material con que se fabriquen. Uno con 22 asientos cuesta $ 90 mil. En cambio, el de 30 asientos y 3 puertas cuesta $ 150 mil”, aseveró.

DATOS

El diseño, ensamblaje, montaje, pintado, pulido y acabado de esta clase de unidades de transporte turístico toma entre 5 y 6 semanas.

Carrocerías Jácome es una de las empresas más reconocidas de la ciudad de Ambato. Funciona desde 2004 y está ubicada en la parroquia Huachi Grande, en el sur de la ciudad.

A escala nacional, el sector carrocero es otra de las actividades que distinguen a Ambato, a más de la agricultura, avicultura, acuicultura y ganadería.

La Agencia Nacional de Tránsito (ANT) ha homologado en la urbe a 46 empresas ensambladoras de buses, camiones y otros vehículos de carga pesada.

El bus tranvía consta de un chasis para bus trolly, sobre el cual se monta una carrocería de tubería estructural con material galvanizado y apliques de madera y vidrio.