Entrevista / Ramsés Torres / alcalde de Guaranda
"Arribo de migrantes y los actos unen a las familias guarandeñas"
Durante el carnaval, a Guaranda no solo llegan turistas de otras provincias o países. Arriban también guarandeños y bolivarenses que migraron a otras latitudes por motivos laborales, académicos y otros. Ramsés Torres, alcalde de Guaranda, en entrevista con EL TELÉGRAFO explica la importancia que esta festividad tiene para la ciudad.
En pocas palabras, ¿qué significado tiene el carnaval para los guarandeños?
Representa varias cosas para nosotros, entre ellas alegría, fiesta mayor, mayor época turística del año, pero, sin duda, es además sinónimo de reencuentro, pues en esta fecha regresan a la ciudad quienes por diversas razones emigraron y una vez al año, retoman y fortalecen los lazos familiares y amistosos, con quienes residen en la ‘Ciudad de las Siete Colinas’. Este sentimiento de hermandad entrañable data de hace varios siglos, pero a diferencia de otros aspectos, con el tiempo, lejos de desaparecer, se va fortaleciendo.
A escala nacional, ¿en qué ciudades están las colonias de bolivarenses más grandes?
Pues podríamos decir que en Quito y Guayaquil, aunque también se debe señalar que en Ambato y otros cantones de Tungurahua, así como en Portoviejo, residen bolivarenses que por negocios y educación han salido a estas localidades.
Hablando de la organización de la fiesta, ¿cuál es el presupuesto de este año para el carnaval?
El monto para la presente edición es de $ 500 mil, con lo que se costea la participación de unidades educativas, barrios, instituciones, así como los eventos culturales y presentaciones musicales, entre otros gastos que conlleva la celebración. Más que un desembolso, nosotros vemos a esta cifra como una inversión, pues la llegada de los turistas reactiva el sector comercial, gastronómico y hotelero
Durante la celebración, ¿se juega con agua en Guaranda?
Sí, pero hay que explicar algo: en Guaranda no se obliga a nadie a participar de esta tradición, es algo opcional, aunque se ha de decir que casi todos nos visitan con el objetivo de jugar con agua. Yo suelo mojarme en la pileta del parque central como parte de un ritual ancestral, pero no se obliga a nadie.
¿Qué nos puede decir en cuanto a la seguridad?
El orden está garantizado. Tanto la Policía Nacional como la Cruz Roja, los Militares y un grupo de jóvenes voluntarios que patrullan durante los desfiles vigilan el normal desenvolvimiento de todos los actos y presentaciones. (I)