El Gobierno Nacional dio a conocer hace unos días, un decreto para el establecimiento de techos de precios a 46 productos agropecuarios tales como frutas, verduras, carnes y huevos para evitar la especulación.

Esta facultad está dada en la Ley Orgánica de Regulación  y Control de Poder de Mercado, aprobada en 2011, la cual le da potestad al Ejecutivo para establecer políticas de precios.

Los productores de papa, reunidos en la asociación Conpapa de Riobamba, piden estudios de los rubros de producción a nivel del país. “En la zona central hay dos épocas marcadas, una para la siembra y otra para la cosecha. Hay meses que tenemos sobreoferta, como febrero marzo y abril; pero en los meses de julio, agosto y septiembre no hay producción y el precio naturalmente sube”, dijo Paúl Vásquez, dirigente de la organización.

Este momento, el costo del quintal de papa ha bajado y se lo comercializa a entre 8 y 10 dólares, dependiendo de la variedad. Muchos comerciantes coinciden en señalar que es importante lograr la asociatividad para buscar de manera conjunta otros nichos de mercado y evitar a los intermediarios. Piden, además, que el Gobierno genere estos espacios, tomando en cuenta la posibilidad de abastecer a entidades como las Fuerzas Armadas, Policía Nacional, INFA, entre otras.

“Es importante crear una política a través de los mercados mayoristas, para que tengan información anual y tener un punto de comparación. Y así, través de ello, controlar el precio para beneficio del productor y del consumidor”, dijo Vásquez.

El dirigente pidió también que el Gobierno planifique la producción, según las zonas, en función de características y el uso del suelo. Solo así se podran controlar de forma real los precios en el mercado y no solamente con un decreto, afirmó.

Por su parte, Víctor Anguieta, director del Ministerio de Agricultura, Ganadería, Acuacultura y Pesca (Magap), en Chimborazo, ve el tema de los precios más allá. “Cuando algunos productores refieren que los incrementos se producen por la caída de ceniza o por la sequía, es un proceso de elevación injustificado”, manifestó.

Según el funcionario, a través de ese Ministerio el trabajo se ha enfocado en fortalecer los procesos de producción y comercialización mediante la asociatividad. Estas son nuevas estrategias que permitirían tener un control de los precios en el mercado al otorgarles a los productores mayores facilidades para la comercialización de sus productos.

Anguieta agregó: “Las iniciativas productivas que damos como asesoramiento disminuirán los intermediarios. Estamos estableciendo diferentes centros de acopio que también disminuirán el precio de venta y mejorarán los ingresos familiares de los agricultores, no solo en hortalizas, sino en otros productos como la leche”.

Según el Decreto, existirá una tabla que incluirá 46 ítems, en la que se dará una referencia de precio promedio para que el consumidor no se vea perjudicado por elevaciones injustificadas. Además, asigna a las gobernaciones, intendencias y comisarías la posibilidad de efectuar operativos de control.

Fernando Esparza, gerente de la Empresa Pública Mercado de Productores San Pedro de Riobamba, explicó que se prepara para cumplir las nuevas disposiciones. “Nosotros daremos cumplimiento a lo que dice el Gobierno Nacional, según el listado correspondiente y se mantendrán los controles respectivos, los que ya son permanentes al interior de nuestra empresa”, manifestó.

El funcionario explicó que, en base de su experiencia, son la oferta y la demanda las que determinan el precio de los diferentes productos en el sector agrícola y reconoce que muchas veces existen incrementos en los mismos por temporada. “Los productos para preparar la tradicional fanesca de Semana Santa, por ejemplo, se incrementan en un cinco a ocho por ciento”, dijo.

Mientras que el funcionario del Magap indicó que “la coordinación y control de precios se hará entre las dependencias de la Sierra y la Costa y que se trabajará a través de sitios web publicando los precios de producción de los diferentes sitios de abasto”. Esto con el fin de controlar que se cumpla el parámetro de los 46 productos referenciales.

Desde la provincia de Chimborazo se abastece a  mercados importantes como Quito y Guayaquil, fundamentalmente. Se estima que 200 comerciantes cumplen el servicio de traslado de productos para el puerto principal, generando una actividad que suma un promedio de 2 millones de dólares mensuales.