De todos los incendios que ocurren anualmente en la capital tungurahuense el 90% se produce por factores humanos, tales como negligencia e impericia en el manejo de materiales inflamables o artefactos peligrosos.

Los flagelos suelen producirse mayormente entre agosto y octubre, meses en que el cielo de la ciudad luce despejado y soleado durante el día. Esta estadística se presenta no solo en zonas periféricas de Ambato sino en toda la extensión cantonal.

Marco Sánchez, jefe de operaciones del Cuerpo de Bomberos de Ambato, considera que la institución en la que sirve está preparada para las emergencias de la época estival. “Los pequeños descuidos durante una excursión pueden terminar en desgracia. Una pequeña colilla de cigarrillo o botellas de vidrio abandonadas en una zona de matorrales son causantes de grandes desastres que dejan cada año extensas zonas destruidas. En lo que va del año el incendio del mercado Simón Bolívar sigue siendo el evento de mayor consideración, pese a que se han presentado varios flagelos de magnitud considerable en las últimas semanas ”, explicó.

Personal capacitado

Sánchez, quien además es coronel y  jefe de la estación X1 de Ambato, agregó que en la ciudad  existe el suficiente personal bomberil capacitado y dividido en sitios estratégicos. “En Ambato tenemos 4 compañías. La primera está ubicada en el barrio La Merced, cerca del centro, y opera allí desde 1978, pese a que desde 1951 ya funcionaba en un sector cercano. Esta fue la primera compañía que se fundó en la ciudad.

La segunda fue construida años más tarde en la ciudadela La Pradera, en el sur, la compañía 3 atiende incendios y otras urgencias de la zona norte, al interior del Parque Industrial, y la última, que está ubicada en Huachi Grande y se encarga de las emergencias del sector sur-este”, explicó.

Sectores vulnerables

Tras 63 años de experiencia, la casaca roja de Ambato, con un total de 50 bomberos, ha elaborado un croquis de la ciudad en el que se determinan las zonas en las que se producen incendios con frecuencia.

El primer sector identificado en este listado es la Vía Flores, antiguo camino a Guaranda que además  conduce a varias parroquias rurales  del sur, como Pasa y San Fernando,  ya que es una estrecha carretera de doble carril rodeada por laderas de abundante vegetación y grandes árboles de eucalipto.

Allí el sol suele desencadenar grandes incendios forestales que si bien es cierto no cobran vidas humanas por ser un sector poco poblado, se pierde vegetación endémica. La quebrada Yuragashpa, camino a Quisapincha, figura en segundo lugar entre los sectores vulnerables.

El listado continúa con las parroquias Pishilata, Martínez y Yacupamba, en el norte, y ciertas zonas de Huachi Grande, en el sur de la urbe.

De enero a mayo de 2014, el Cuerpo de Bomberos de Ambato ha atendido un total de 99 incendios forestales y 83 llamados por fuga de gas.

Prevención

“El mejor Cuerpo de Bomberos no es el que apaga más incendios sino el que más flagelos previene”. Esta es una frase de Mauricio Bedón, capitán de bomberos al mando del departamento de prevención de incendios. Explica así que la principal tarea del Cuerpo de Bomberos de Ambato es la lucha contra el fuego.

Él, en compañía de 4 agentes más, tiene la tarea de inspeccionar y controlar las condiciones con las que trabajan las diferentes instituciones, fábricas, industrias y empresas, talleres y negocios que operan en toda la ciudad. “Nuestra tarea es revisar las normas y complementos de seguridad que estos establecimientos deben tener para funcionar.

Este es un requisito para obtener el permiso anual de funcionamiento y si no cumplen con normas, tales como poseer un extintor, o extintores dependiendo del tamaño de la infraestructura, señalización para casos de evacuación, instalaciones seguras de electricidad, gas, agua, entre otras; dicho permiso es negado”, indicó.

Capacitación comunitaria

Como un servicio complementario, el Cuerpo de Bomberos de la capital tungurahuense maneja un plan de capacitación dirigido a cualquier institución, empresa, plantel educativo, parroquia o barrio. Solamente debe ser solicitado por la comunidad. “Este programa es gratuito, abierto y se lo desarrolla durante el año. La persona o entidad interesada en recibir este servicio debe enviar una solicitud dirigida a Gregorio Hidalgo, gerente del Cuerpo de Bomberos de Ambato”, dijo.

Después de recibir este documento, el departamento de prevención incluye al solicitante en el cronograma de capacitaciones diarias.

LOS BOMBEROS NO SOLO SOFOCAN INCENDIOS

La labor del Cuerpo de Bomberos no es únicamente apagar incendios, también abarca varias tareas que van desde el traslado de heridos en accidente de toda índole hasta rescate de mascotas. “La primera imagen que se nos viene a la cabeza cuando alguien menciona la palabra bomberos es un flagelo. Hay que entender que las emergencias que un agente bomberil está capacitado para atender son varias, entre ellas podemos mencionar: rescate de personas en sitios inaccesibles, soporte a la población afectada por inundaciones, movilización de un herido en cualquier accidente, rescate de mascotas desde sitios peligrosos, y cualquier otra tarea donde podamos apoyar a las demás entidades de rescate y atención, como la Policía Nacional, Cruz Roja, Personal del Ministerio de Salud, etc.”, dijo Marco Sánchez, jefe de operaciones del Cuerpo de Bomberos de Ambato.

Debido a esto, el personal de la casaca roja participa con frecuencia de capacitaciones enfocadas en ampliar los conocimientos y aptitudes de los agentes. Además de las diversas técnicas de rescate y sofocamiento de incendios, el personal tiene conocimientos de primeros auxilios y atención primaria a heridos. “Desde el correcto uso de una escalera hasta métodos de reanimación humana, son los conocimientos que debe dominar un bombero. Cuando salimos a controlar un incendio, los bomberos vamos con la idea de asistir a los afectados en cualquier área, ya sea en rescates desde lugares altos, inaccesibles o peligrosos, hasta dar apoyo sicológico en caso de siniestros donde se pierden vidas humanas”, agregó Sánchez.