La empresa  pública Cemento Chimborazo ha planificado ejecutar una importante inversión este año, la que permitirá, según la previsión de la compañía, aumentar  su rendimiento y capacidad de abastecimiento al mercado de la construcción, tanto local como nacional.

Con ello, este 2013 se  construirá y se pondrá en marcha  la nueva línea de molienda y despacho de cemento, con una inversión que alcanza los 40 millones de  dólares.

El proyecto  se ejecuta en 20 mil metros cuadrados e incluye tres áreas: molino tubular, silo y un hangar para almacenamiento y despacho del cemento. El proyecto tiene al momento un avance de obra del 98 por ciento.

“La ampliación se debe al requerimiento del mercado nacional. La demanda de cemento está creciendo entre un 6 y 7 % anual. Hubo un incremento de consumo últimamente y esta ampliación busca atender ese requerimiento de la gente", explicó Manuel Román, gerente de la empresa.

La capacidad de producción actual es de 340.000 toneladas anuales, con una clara proyección de crecimiento para el primer trimestre del 2013 a 1 millón de toneladas.

Con la nueva  planta se espera producir 110 toneladas por hora,  ya que cuentan con  el silo más grande del país (63,5 m. de altura) con capacidad para 15.000 toneladas.

Tiene, además, cinco compartimentos para  el acopio de diferentes tipos de cemento. En el sitio de almacenamiento se despachan los sacos empacados mediante termosellado; el lugar tiene una capacidad de bodegaje de cinco mil toneladas.

Juan Molina, gerente de Proyectos, explicó que  en abril empezarían con las pruebas al vacío y con las pruebas en materiales además de la producción, que sería en etapas.

También se tiene previsto que entre en operación el nuevo sistema de despacho con dos mangas telescópicas a granel con básculas integradas, situadas debajo del silo multicámaras y la  entrega de fundas paletizadas y termoselladas.

“En la obra trabajan   150 personas, en promedio. Sin embargo, hay momentos donde se requieren de hasta 250 obreros. El 44% del personal es de la provincia de Chimborazo, por lo que esta obra genera además fuentes de empleo”, sostuvo Molina.

“Nuestro cemento tiene una calidad demostrada; alcanza una mayor resistencia a los 28 días. Estamos situados en un sitio estratégico como  el centro del país, desde donde podemos atender todos los grandes mercados” aseguró Román.

La segunda inversión productiva planteada por la empresa para los próximos tres años es la construcción de una nueva línea de clinkerización, que la compone un horno de mínimo 2.500 toneladas por día para abastecer las moliendas de cemento.

Para ello se requieren de unos 200 millones de dólares, por lo cual se busca un socio estratégico. La implementación de tecnología de última generación en el proceso de molienda de cemento transformará a la Cemento Chimborazo, convirtiéndola en la empresa eficiente y competitiva con tecnología de punta que planifican sus ejecutivos.

Estos dos  proyectos se suman al ya ejecutado en el 2011 cuando se construyó la Fabrica Ecuatoriana de Prefabricados de hormigón con una inversión de 12 millones de dólares y se entregaron los durmientes para el tren ecuatoriano.