El ganador de la edición 50 fue el cuencano byron piedra
3 mil atletas corrieron la Ruta de los 3 Juanes
El evento deportivo más importante de las fiestas de Ambato es, sin duda, la Ruta de los Tres Juanes. La edición número 50 de esta competencia atlética se realizó el viernes 6 de febrero y convocó a unos 3 mil corredores de Tungurahua y otras provincias.
Byron Piedra, destacado deportista cuencano, fue el ganador de la categoría masculina. En la esfera femenina, la ambateña María Pastuña consiguió el primer lugar y Jésica Pahuay obtuvo el segundo puesto.
Las bajas temperaturas y la amenaza de una fuerte lluvia no aplacaron los ánimos de los atletas quienes llegaron al punto de salida, al norte de la urbe, con una hora de anticipación.
María Fernanda Naranjo, vicealcaldesa de la ciudad y una de las organizadoras del evento, manifestó que esta carrera es una de las más multitudinarias del Ecuador.
“La ruta de los 3 Juanes tiene gran convocatoria. Muestra de ellos son los 3 mil deportistas que año tras año llegan para competir. La geografía de la ciudad favorece a los participantes, pues hay descensos, subidas y tramos planos que ayudan a la estabilización del sistema circulatorio”, dijo.
El recorrido
La competencia inició en el partidero a la parroquia Atahualpa, a las 19:00, y continuó por la avenida Rodrigo Pachano.
Patrulleros de la Policía Nacional y de la Agencia Municipal de Tránsito y Transporte escoltaron a los deportistas en todo momento. Los agentes del orden se anticiparon por la vía y abrieron paso a la carrera.
Tras un gran descenso por la calzada en el sector El Socavón, los corredores continuaron por la avenida Rodrigo Pachano, avanzaron hasta el jardín botánico La Liria, justo en frente de la quinta de Juan León Mera.
Allí los organizadores colocaron mesas con botellas de agua para que los deportistas se hidraten. Además un equipo de médicos deportólogos permaneció en el lugar por si se presentaban desmayos u otras afecciones típicas de las carreras.
Marco Tenelema, competidor habitual, señaló que en este tramo el cansancio suele jugar una mala pasada a los corredores. “En más de una ocasión varios deportistas se han desvanecido allí, especialmente mujeres y varones muy jóvenes. Una carrera de esta magnitud requiere una preparación mínima de un mes corriendo y haciendo ejercicio aeróbico”, dijo.
La carrera continuó por el colegio Rumiñahui, por la avenida Los Guaytambos y llegó hasta el parque Los Quindes, en el barrio Ficoa.
Sin detenerse y tras recibir el aplauso de los moradores del lugar, la carrera siguió por la calle Miraflores.
Varias personas que se movilizan en silla de ruedas también participaron en la carrera. Esto no fue un impedimento para que estos atletas con capacidades especiales suban por la calle Urdaneta y lleguen hasta el estadio Bellavista, donde hubo un recibimiento masivo y la premiación a los ganadores. “Lo importante es competir y cultivar la salud”, manifestó Marcelo Alvear, corredor en silla de ruedas.