A pesar de que en Ambato y Tungurahua se confecciona el 50% de la producción anual de calzado del país, esta ciudad no cuenta con una gran infraestructura que concentre la hechura y comercialización de zapatos.

Más de 5 mil fabricantes están dispersos en sitios que han alcanzado renombre nacional como Quisapincha, Picaihua, Benítez, Cevallos, Augusto N. Martínez, Atahualpa y diversos barrios ambateños.

Según la Cámara de Calzado de Tungurahua (Caltu), en 2013 se confeccionaron en esta provincia 16 de los 32 millones de pares de zapatos que se expendieron en las 24 provincias ecuatorianas.

Por eso, tanto la organización como los integrantes de 3 asociaciones de vendedores de la tradicional Plaza de Calzado Juan Cajas planifican a largo plazo edificar y reconstruir, respectivamente, 2 centros comerciales de gran envergadura para visibilizar mejor esta actividad. El primero se ubicará en la parroquia Cunchibamba, situada al norte de la capital tungurahuense.

Según Lilia Villavicencio, presidenta de la Caltu, 25 fabricantes trabajan en este proyecto que está considerado uno de los más importantes de la Sierra centro. “Haremos de Cunchibamba un nuevo polo de desarrollo económico y productivo. Allí se construirá, en los próximos 3 años, una suerte de parque industrial dedicado íntegramente al calzado.

Los turistas podrán observar la manufactura y comprar directamente sin intermediarios. Contaremos con almacenes y exhibidores modernos y adecuados a las exigencias del consumidor, la moda y el diseño”, aseguró Villavicencio.

Este sector puede impulsar este tipo de empresas porque creció significativamente desde 2009 (de 600 a 5 mil productores), cuando el Gobierno Nacional puso en práctica las salvaguardias y el arancel mixto para impulsar la manufactura local de zapatos.

Ángel López, presidente de la Unión de Asociaciones del Centro Comercial Juan Cajas, explicó que esperan el apoyo de la nueva administración municipal para impulsar la remodelación integral de este centro de comercio que actualmente funciona en el sector de Ingahurco, frente a la estación del tren, la terminal terrestre y cerca de la Universidad Técnica de Ambato (UTA).

“En este lugar estamos más de 25 años y en ese tiempo con nuestro esfuerzo realizamos la instalación de los servicios básicos. Sin embargo, ahora tenemos problemas con las conexiones eléctricas y tememos que se produzca un incendio de magnitud como el que ocurrió en el Centro Comercial Popular Simón Bolívar”, explicó  López.

Además, los 1.000 comerciantes esperan contar con la suficiente solvencia para conseguir el apoyo de la Corporación Financiera Nacional (CFN) y con eso efectuar un remozamiento integral que volvería a este sitio un centro comercial de zapatos moderno y bien ubicado.