Los jóvenes quiteños insisten en vivir las fiestas en paz
Una caminata y un concierto marcan hoy, el inicio de la 13° edición de la campaña ‘Vivamos la fiesta en paz’, organizada por la Red de Consejos Estudiantiles de Quito.
El objetivo es promover la celebración de unas fiestas de fundación capitalinas sin abuso de alcohol ni desgracias que lamentar.
La caminata arrancará a las 09:00 desde La cruz del Papa (parque La Carolina) hasta el parque Bicentenario (antes aeropuerto). Y luego se realizará en este espacio verde el concierto 65 minutos de música por la vida.
Según los organizadores, se espera que participen más de 15.000 personas en las actividades de hoy.
Marco Dávila, coordinador de la campaña, afirmó que los eventos que se desarrollan en diciembre son los más visibles, pero no los únicos. El trabajo, según Dávila, se efectúa durante el año e implica, entre otras cosas, charlas de concienciación sobre el problema del alcohol en los colegios de la ciudad.
Esto lo realiza un equipo de cinco técnicos especialistas en alcohología social que, según el coordinador, usan un enfoque totalmente distinto al que tiene la siquiatría o sicología tradicionales.
Lo que se busca es lograr un cambio de conducta social, apuntando a que los jóvenes no son el problema y que ellos empiezan a consumir licor imitando a alguien en su entorno familiar y social.
Según datos de la organización no gubernamental (ONG), que capitanea la iniciativa, el Municipio de Quito ha colaborado en el transcurso de este año con unos 200.000 dólares para desarrollar la campaña.
Por otro lado, según los promotores de ‘Vivamos la fiesta en paz’, alrededor de 250 colegios han sido declarados ‘libres de alcohol’, lo que equivale a un universo de unos 50.000 jóvenes.
Los colegios son declarados libres de alcohol basados en el establecimiento de una cultura institucional en la que el alcohol no está presente, por decisión de autoridades, profesores, padres de familia y estudiantes de cualquier actividad, tanto académica como extra académica.
Ana Emilia Poveda, estudiante del Liceo Internacional, señaló que la campaña permite a la gente, especialmente a los jóvenes, ver que se puede disfrutar de una fiesta sin alcohol. “Que existen muchas opciones para divertirse sin que al otro día te estés preguntando qué pasó”, afirmó la adolescente.