Publicidad

Ecuador, 18 de Enero de 2025
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
Comparte

Los barrios del sector de La Ecuatoriana esperan por obras desde hace un año

Luis Guaita, morador del barrio La Inmaculada, asegura que entregó alrededor de $ 15 mil al Municipio para ejecutar el adoquinamiento del pasaje B46, sin que esto se haya cumplido hasta ahora. Foto: Santiago Aguirre / El Telégrafo
Luis Guaita, morador del barrio La Inmaculada, asegura que entregó alrededor de $ 15 mil al Municipio para ejecutar el adoquinamiento del pasaje B46, sin que esto se haya cumplido hasta ahora. Foto: Santiago Aguirre / El Telégrafo

El sector La Ecuatoriana, ubicado al suroeste de Quito, nació hace unas 4 décadas. Fue el expresidente José María Velasco Ibarra quien dispuso que la hacienda Turumbamba de Monjas sea parcelada con el fin de entregársela a 40 socios de la cooperativa La Ecuatoriana.

El crecimiento del sector fue imparable debido al prominente desarrollo urbanístico de la capital, sobre todo en ese lugar que también acogió a una extensa población migratoria.

Varios vecinos del sector aseguran que el nombre de La Ecuatoriana se debe a un antiguo programa de radio en el que se reunían los dirigentes barriales de la zona para solicitar obras al Municipio.

La Ecuatoriana es una de las parroquias más grandes de la ciudad. Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Inec) en ese punto del Distrito viven alrededor de 22 mil habitantes. 

“La Ecuatoriana surgió con el sudor de la frente de sus moradores, pues al inicio no teníamos servicios básicos, lavábamos la ropa en la quebrada Calicanto. Nosotros creamos caminos, pues al inicio esto eran lotes rurales. Así, poco a poco fue creciendo el sector”, dijo Manuel Cajilema (75).

La parroquia se consolidó como un sector urbano a partir de los años 80 y actualmente alberga a 44 barrios y cooperativas de vivienda. Varios sectores que pertenecen a La Ecuatoriana se encuentran en proceso de regularización.

Actualmente la zona cuenta con todos los servicios básicos, aunque, como en todos los sectores de Quito, aún se requieren obras.

“A la Alcaldía le puede parecer pequeña la pavimentación de una calle, el arreglo de una vereda, la construcción o el mejoramiento de un espacio verde, pero para quienes vivimos aquí, estas obras son primordiales porque mejoran nuestra calidad de vida”, comentó Blanca Pesantes, otra vecina.

Según los habitantes, la actual Alcaldía no ha cumplido con las obras requeridas por la comunidad, a pesar de que incluso algunas de ellas ya han sido financiadas por los mismos vecinos.

Entre las obras más importantes está el adoquinamiento del pasaje B46 en el barrio La Inmaculada. En el barrio Juventud es primordial la construcción de un graderío en una pendiente que une el barrio con la escuela.

Luis Guaita, quien vive en el sector La Inmaculada desde hace 20 años, comentó que hace más de un año los moradores del sector solicitaron a la Administración Zonal Quitumbe estas obras, pero no han recibido respuesta hasta el momento.

“Hace un año el Alcalde vino a La Ecuatoriana y, en buses, nos llevaron a un recorrido por el sector con la intención de que conozcamos las obras que se concluirían y se realizarían. Pero desde entonces ni las autoridades ni las obras han llegado”, comentó Guaita.

El morador comentó que hace poco más de un año los vecinos del sector recogieron $ 15 mil para ejecutar el adoquinamiento del pasaje B46. Ese dinero habría sido entregado en la Administración Zonal, pero la obra no se realiza hasta el momento. Según el morador, uno de los factores para que varios trabajos en el sur de la ciudad no se realicen es la inestabilidad que existe en la Administración Zonal Quitumbe.

“Yo voy 2 veces por semana y siempre recibo la misma respuesta: ‘que hay cambios en la jefatura de la Administración y que ninguna obra se realizará’”, reclamó Guaita. 

De igual manera, Gustavo Ormaza, presidente del barrio Juventud, aseguró que desde el año 2006 solicitaron al Municipio la construcción de una escalinata en una pequeña elevación de tierra que une al barrio con una de las escuelas del sector.

“En época de lluvia es difícil acceder a este sitio y es muy peligroso pues quienes utilizan este paso corren el riesgo de caerse o resbalarse; incluso el lugar se ha convertido en un botadero de basura y las ratas abundan”, sostuvo el morador.

Blanca Pesantes, expresidenta de los barrios del sur de Quito, comentó que otro de los problemas que tiene el sector La Ecuatoriana es el microtráfico, pues en las madrugadas —aseguró— la venta de estupefacientes se realiza sin ningún tipo de control; incluso la venta se realizaría en locales comerciales tales como cabinas de Internet y de venta de gas.

“El trabajo de la Policía no es suficiente, pues la venta de droga no para y los afectados son nuestros jóvenes”, dijo Pesantes.  

Erlinda Reinoso, otra dirigente barrial de La Ecuatoriana, mencionó que alrededor de 12 manzanas necesitan la intervención de sus vías secundarias, además de la adecuación de espacios públicos.
Reinoso añadió que el problema para que las obras concluyan se debe a que los nuevos funcionarios de la Administración Zonal Quitumbe desconocen los procedimientos burocráticos que deben seguir para este tipo de temas.

Reinoso fue enfática al solicitar a Mauricio Rodas, alcalde de Quito, que se preocupe más de la situación de los barrios del sur de la ciudad, que no se olvide que hace un año muchos moradores, al igual que del barrio La Inmaculada, dieron el 50% del monto requerido para las obras prioritarias de los barrios.
“Es necesario que se mejore la situación administrativa en Quitumbe, pues casa 15 días nos encontramos con cambios de autoridades”, finalizó. (I)

Contenido externo patrocinado

Ecuador TV

En vivo

El Telégrafo

Pública FM

Noticias relacionadas

Social media