Las serenatas marcan el punto más alto de los festejos a la ciudad
El “Viva Quito” se extendió anoche por toda la ciudad, acompañado del baile del “Chulla Quiteño” y un “canelazo”.
Y es que las fiestas llegaron a su punto más alegre. “Las serenatas y bailes populares” que se prolongaron hasta la madrugada de hoy marcaron los últimos actos de festejos.
Solo quedan pocos (actos) para hoy, entre ellos la sesión solemne organizada por el Municipio Metropolitano.
Al compás de pasillos, tonadas, pasacalles, yaravíes y memorables temas interpretados por inspirados quiteños, la ciudadanía exteriorizó su alegría.
Así nació la serenata
La serenata es una de las tantas costumbres que heredamos de los españoles, pero se ha ido perdiendo con el devenir del tiempo.
Sin embargo, tomó carta de naturalización en los barrios quiteños y por mucho tiempo se constituyó en la única forma de acercarse a la persona amada, pero esta vez es un tributo a la ciudad de parte de los moradores donde se conjuga la noche, el barrio, los amigos y los festejos por la ciudad.
La serenata recrea uno de los sonidos más hermosos que se escuchaban en las frías noches y amaneceres quiteños, que estaba cargado del sonido que brota del corazón de una guitarra.
El historiador Juan Pazmiño dice que las calles estrechas de la ciudad fueron cómplices de la composición de los mejores temas y un escenario para que los trovadores se posesionaran de ellas y bajo un balcón entonaran sus canciones.
Los artistas, la prenda para alquilar la guitarra, la cuota para comprar las dosis de aguardiente, acompañadas de una infusión de canela servían para neutralizar los temores del enamorado y aflojar los dedos del guitarrista.
La costumbre es dar serenatas a las “guambras”, al igual que otras manifestaciones populares que dieron el carácter de única a nuestra capital y de especiales a sus habitantes, quienes se suman al recuerdo.
Ayer en la noche todos los barrios de la capital esperaban sumarse a los festejos. Miriam Manobanda, presidenta de la Federación de barrios de Quito, dijo que este año la serenata tiene el objetivo de “enviar el mensaje de unidad para todos los sectores”.
Serenata en Carondelet
Al cierre de esta edición, desde el Palacio Municipal, ubicado frente al Palacio de Carondelet, salió la Banda Municipal integrada por 47 músicos, quienes al ritmo de “Chulla Quiteño”, “Lindo Quito de mi Vida” y “La Tuna Quiteña” pusieron a bailar a las autoridades locales.
Los músicos; el alcalde Augusto Barrera; concejales y las autoridades del Cabildo junto a la reina de Quito, Andrea Callejas, se encaminaron hasta el Palacio de Gobierno para homenajear a la ciudad con la tradicional serenata Quiteña, dirigida al Jefe de Estado.
Estaba previsto que el evento se realice en el patio interno del Palacio de Gobierno, luego de lo cual el Jefe de Estado y las autoridades partirían hacia Las Cuatro Esquinas (en Chimbacalle) donde esperaban compartir con la ciudadanía la serenata quiteña.