Publicidad

Ecuador, 25 de Noviembre de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
Comparte

La González Suárez es la tercera zona 30 de Quito

Desde el redondel Churchill hasta el redondel que da al hotel Quito, se pondrán 11 señales verticales y 26 señalizaciones horizontales.
Desde el redondel Churchill hasta el redondel que da al hotel Quito, se pondrán 11 señales verticales y 26 señalizaciones horizontales.
Foto: Álvaro Pérez / El Telégrafo
20 de abril de 2018 - 00:00 - Redacción Ecuador Regional

En la avenida González Suárez, ubicada al norte de Quito, los vehículos podrán circular a una velocidad máxima de 30 kilómetros por hora (km/h). El barrio se convirtió en la tercera zona 30 de la capital.

El Quito Tenis fue el primero. En 2012, la medida se implementó en más de 10 calles de la zona. Cuatro años después, La Floresta fue el segundo barrio en acogerse al reducido límite de velocidad al implementarlo en cuatro vías principales del sector.

La seguridad vial, tanto para conductores como para transeúntes, es el principal objetivo de esta medida.

“Nada justificaría que hayan fallecidos en una vía. Se están tomando las medidas del caso para que eso no ocurra”, explica Cristian Zaragocín, gerente de Operaciones de Movilidad de la Empresa Pública Metropolitana de Movilidad y Obras Públicas.

Según el funcionario, un estudio realizado del sector de la avenida González Suárez, determinó que existe un alto índice de accidentes con vehículos, circulación a alta velocidad y un elevado número de personas de la tercera edad a quienes les resulta difícil cruzar la calle por el desorden de los carros estacionados y por la alta velocidad en que circulan los conductores.

Es así que, además del límite de velocidad, se estableció un ordenamiento de estacionamientos en ambas calzadas y la colocación de varios cruces peatonales reforzados con la señalización horizontal y vertical.

Muchos moradores se quejan por la alta velocidad con la que circulan los vehículos, sobre todo la noche y madrugada. Inés Magnenat, de 70 años, asegura que le es difícil cruzar la calle justamente por esta razón. Considera que con esta medida el barrio será más tranquilo.

“Los carros pasan como si fuera una autopista. Es necesario el límite de velocidad, pero también que controlen que se cumpla”, dice María Parra, de 50 años.  

Ser una zona 30 tendrá un impacto en las calles aledañas, pues podría causar mayor congestión vehicular. Pero para Zaragocín toda medida es justificada si es a favor de la seguridad vial. (I)

Contenido externo patrocinado

Ecuador TV

En vivo

El Telégrafo

Pública FM

Noticias relacionadas

Social media