Un grupo de turistas visitó ayer el Parque Nacional Cayambe-Coca, ubicado en la Cordillera Oriental de los Andes. En tanto que un recorrido similar se efectuará hoy por las estribaciones del volcán Antisana, en el extremo suroriental del Distrito Metropolitano.

En el primer caso, la visita incluía conocer el centro de interpretación ambiental El Exploratorio, donde es posible instruirse de forma lúdica sobre la fauna del sector y de dónde proviene el agua que consumimos en la ciudad; además, aprender sobre los páramos y humedales andinos. Al final estaba previsto que los visitantes disfruten de las aguas termales de Santa Catalina.

En el segundo, la invitación implicaba caminar por los senderos de lava petrificada de la última erupción del Antisana, pasear en lancha en la laguna de Secas, observar cóndores andinos, curiquingues, gaviotas de páramo, bromelias, orquídeas, chuquiraguas y otras especies de la flora del microclima de ese bosque primario. Como parte del tour, los participantes realizarán pesca deportiva en las aguas de la laguna Mica, que da origen a uno de los mayores sistemas de abastecimiento de líquido de la capital.

El proyecto Mica-Quito Sur empezó a operar hace 14 años y beneficia a 276 mil personas que habitan desde el sector de Quitumbe hacia el sur, alcanzando el límite con el cantón Mejía. Es uno de los 4 sistemas de abastecimiento de agua de la ciudad.

Las rutas fueron organizadas por la empresa metropolitana Quito Turismo de manera especial para este feriado y forman parte del proyecto iniciado por la entidad para generar recorridos novedosos tanto en la parte urbana como en los alrededores de la ciudad.

Los recorridos se realizan al final de cada mes y, por sus características, las inscripciones están destinadas para pocas personas.

Un ejemplo de ello fue el tour realizado a propósito de la época navideña por áreas que, por lo general, no están abiertas al público de 6 conventos e iglesias; entre ellas, los campanarios y las cúpulas.

Ese producto de Quito Turismo contemplaba, el ingreso a zonas interiores de los monasterios de La Merced, Santo Domingo, San Agustín, Santa Clara, El Carmen Alto y El Carmen Bajo, todos en el Centro Histórico.

Durante la visita al primero de ellos, el padre Eduardo Navas, rector de la Basílica, contaba que Serafín, un sordomudo afroecuatoriano, fue el último relojero que tuvo la iglesia quiteña hasta hace unos 70 años.

El relato lo hacía parado en la parte más alta del templo que, según algunas fuentes, alberga la campana más grande del Ecuador.

No obstante, el sacerdote afirmó que no se conocen con precisión las dimensiones ni el peso del instrumento metálico, aunque hay quienes asegurarían que hasta las primeras décadas del siglo pasado, su tañer podía escucharse en zonas tan alejadas como Machachi (suroriente) y El Quinche (nororiente).

Al llegar al monasterio de Santa Clara, cerca de la avenida 24 de Mayo, el guía Julio Rivas relató que algunas personas todavía conservan la tradición de llevar presentes, sobre todo canastas con huevos, a cambio de rezos a las religiosas franciscanas de clausura que viven en su interior. Algo que -añadió- practican principalmente las novias para lograr que no llueva el día de la boda y que el matrimonio conserve siempre la felicidad.

El sitio, señaló Rivas en diciembre pasado, tiene en su techo una cúpula tipo pucará, inspirada en la forma de El Panecillo.

Así mismo, a propósito de la Semana Santa del año anterior, quizás la fiesta religiosa más fuerte en el Ecuador, se realizó una serie de actividades en la ciudad.

Entre ellas, 2 recorridos turísticos por zonas rurales urbanas del cantón. Una fue la ruta que llevó a turistas y feligreses desde Quito hasta la parroquia La Merced, ubicada en el valle de Los Chillos. El tour fue vendido desde la perspectiva de la procesión que se realiza todos los años en el lugar y que conlleva la participación de personajes ancestrales como soldados romanos, almas santas y almas negras (con bonetes de hasta 5 metros de altura), pingulleros y los traviesos y característicos diablos de La Merced.

Otro ejemplo de estos recorridos diseñados de manera especial de acuerdo con la época del año, especialmente en concordancia con el calendario religioso, fue el ocurrido en noviembre del año anterior, a propósito del Día de los Difuntos.

Así, el cementerio de San Diego, las plazas, iglesias y museos del Centro Histórico, La Ronda y las parroquias rurales del Distrito fueron escenario de ritos funerarios, representaciones artísticas y manifestaciones culturales.

En el caso del camposanto ubicado en el Centro Histórico quiteño, el 1 y 2 de noviembre pasados, se realizaron recorridos teatralizados sobre los rituales y secretos que se practicaban antiguamente para honrar a los difuntos.

Así mismo, Quito Turismo organizó recorridos por la Catedral capitalina, que incluían visitas a la tumba del Mariscal Antonio José de Sucre y las criptas subterráneas.

Por la misma época, el convento de San Francisco acogió recorridos por su claustro principal, en tanto que la iglesia de La Compañía permitió visitas a sus criptas. Al tiempo que el museo de La Ciudad, realizó la exposición Vida y muerte, a propósito de que el sitio albergaba antiguamente el Hospital San Juan de Dios.

No obstante, quizás el evento más interesante organizado por Difuntos fue el recorrido por la parroquia Calderón, para la escenificación de los rituales de la huanlla (llamado a los seres queridos fallecidos), mañaicuna (pedidos a los familiares fallecidos) y tushuicuna (agrado a los seres queridos).

Todo aquello porque el Cabildo busca la consolidación de los viajes de interés cultural, mediante la apertura de nuevos esquemas, según Patricio Gaybor, gerente técnico de Quito Turismo.

Y dentro de esos planes está el fomento del turismo religioso. “Quito tiene un potencial enorme en ese sentido. Hemos explotado el Centro Histórico, pero no ciertas particularidades que posee, tales como recorridos específicos por iglesias o la asistencia a eventos religiosos del año”, afirmó el funcionario.

Mirada a los alrededores
George Robertson, un estadounidense que se encuentra en el país, averiguaba ayer sobre posibilidades de visita a sitios cercanos a la ciudad (para tours de 1 día) en el punto de información turística ubicado en la intersección de las calles Juan León Mera y Joaquín Pinto (zona de La Mariscal).

El encargado le comentó sobre las características de Mindo y Papallacta, como las opciones más cercanas y que permiten hacer viajes cortos.

Robertson mostró interés en el bosque subtropical ubicado en la zona noroccidental y expresó su admiración por la serie de posibilidades que ofrece la ciudad para visitar y conocer en poco tiempo.

“Tienen el Centro Histórico, la Mitad del Mundo y estas zonas de bosque que se encuentran a poca distancia y son económicas”, aseguró el visitante de Michigan en un español despacioso.

Su esposa Anne añadió que antes de su arribo, del Ecuador solo habían escuchado hablar sobre las islas Galápagos y algo de la parte colonial quiteña. “Pero ahora sabemos la idea de que es un país muy lindo con muchas cosas que conocer”, completó la mujer en una mezcla de inglés y español.

Una visita a la zona de Mindo, que toma casi 8 horas, tiene un costo de entre $ 50 y $ 70, dependiendo del número de personas que se apunten al viaje y de los servicios que se brinden. La mayoría de operadoras consultadas coincidieron en que el tour implica, por lo general, desplazamiento, guianza y, en ciertos casos, alimentación y entrada a ciertos sitios.

Del mismo modo, un recorrido por la zona de Papallacta (oriente) cuesta entre $ 50 y $ 80. Estas tarifas, incluye, la mayoría de las veces, el pago de acceso a las termas que hacen famosa a la zona.

Un representante de una de las agencias de turismo ubicadas en la zona de la plaza Foch (centro-norte) y quien pidió no ser identificado por razones comerciales, aseguró que en los últimos años ha crecido el interés de los turistas por visitar los atractivos rurales del Distrito.

“Antes, la ciudad servía prácticamente solo como zona de paso para ir tanto a Galápagos como a la Amazonía. Pero eso ha cambiado y ahora, la gente viene específicamente a Quito”, apuntó.

Como parte de estos planes de expansión turística, el Cabildo implementó el año pasado 2 espacios turísticos en el noroccidente del Distrito, las que combinan actividades como el ciclismo, las caminatas y recorridos de conocimiento.

Una de ellas es la visita al área protegida Mashpi-Guaycuyacu-Saguangal, que desde mediados del año pasado cuenta con facilidades turísticas como pérgolas (armazones con jardines en la cubierta) para descansar, juegos infantiles, baterías sanitarias, bancas y mesas para picnic, un mirador y 2 rutas de bicicleta: Pacto-Mashpi y Pacto-Santa Rosa.

La intervención en Mashpi-Guaycuyacu-Saguangal fue realizada por el Municipio de Quito, a través de la Secretaría del Ambiente y Quito Turismo y beneficia, de manera directa e indirecta, a 400 familias de las comunas de la localidad. Algunas de ellas participaron en la instalación de los servicios turísticos. El monto total de inversión ascendió a los $ 115.875.

En esas áreas es posible visibilizar la riqueza natural de Quito y disfrutar de actividades como caminatas, senderismo, ciclismo de montaña y avistamiento de aves, entre otras.

Para llegar en vehículo particular a esa zona se debe tomar la vía Calacalí - Nanegalito hacia la población de Pacto; luego tomar el camino lastrado La Delicia - Mashpi. También se puede ir por la vía Calacalí-La Independencia hasta el kilómetro 104, curvar hacia la derecha y avanzar hasta las poblaciones de Mashpi y Pachijal.

Mashpi-Guaycuyacu-Saguangal y el Sistema Hídrico y Arqueológico Pachijal suman en conjunto 33.038 hectáreas.

Allí existen bosques húmedos que albergan mamíferos, aves, anfibios, reptiles y plantas vasculares que reflejan la biodiversidad de estos ecosistemas.

Uno de los mamíferos que se encuentran en los bosques nublados del noroccidente es el oso de anteojos, especie que está en peligro de extinción.

UNA CIUDAD CONVERTIDA EN IMÁN TURÍSTICO

609.277 turistas conocieron la belleza natural y arquitectónica de Quito en 2013, lo que se traduce en un crecimiento del 14%, en relación a los 533.458 visitantes que llegaron en el período inmediatamente anterior.

Los lugares más visitados en el área urbana fueron el Centro Histórico, que registró el 61% de llegadas y La Mariscal, el 22%. Mientras que en el área rural, la Mitad del Mundo recibió el 60% del total de visitas a parroquias. Además, la capital recibió el año pasado varios reconocimientos. Entre ellos fue escogida como Destino Líder de Sudamérica en los premios World Travel Awards, conocidos también como los ‘Óscar’ del Turismo. Además, la revista Traveler, de National Geographic, incluyó a Quito en la lista de los 20 The Best of the World: our must see places for 2013. Mientras que TripAdvisor distinguió a la urbe como uno de los 10 destinos por descubrir en 2013. En tanto que Quito fue uno de los 10 destinos por descubrir según Lonely Planet, entre otras distinciones.

Para este nuevo año, Quito figura en 2 concursos internacionales.

Está en la cuarta fase del concurso que elegirá a las 7 Ciudades Maravilla del Mundo y participa junto a otras 27 capitales turísticas mundiales como: Atenas (Grecia), Barcelona (España), Chicago (EE.UU.), Praga (Rep. Checa), Estambul (Turquía), San Petersburgo (Rusia), Londres (Inglaterra), Seúl (Corea), etc.La ciudad también defenderá su condición de actual ganadora como Destino Líder de Sudamérica en los World Travel Awards 2014.

En el área de eventos, la Asociación Internacional de Congresos y Convenciones (ICCA) señaló que Quito pasó del puesto 99 a nivel mundial en 2009, al 83 en 2012, gracias a la gestión de captación de sedes para eventos de gran trascendencia internacional.

Este año, la urbe será la sede de encuentros de primer nivel, entre los que se destacan: World Travel Awards 2014, VII Sahic (South American Hotel & Tourism Investment Conference), Campeonato Mundial de Carreras de Aventura (ARWC) 2014 y el II Congreso Continental de Cocinas Patrimoniales. A estos eventos se suma la presentación de las bandas de rock Metallica y Megadeth que ubica a la capital en la ruta de los grandes circuitos artísticos internacionales. De acuerdo a este ritmo de crecimiento progresivo, se estima que 680 mil turistas visitarán Quito en 2014, lo que representa el 13% de crecimiento adicional de llegadas en relación a 2013; en consecuencia, se proyecta que recibirá 1 millón de turistas hasta 2018.