La caminata al Quinche es una tradición popular arraigada

Miles de personas acudieron a la tradicional camita al santuario de El Quinche el pasado noviembre. Algunas lo hicieron por fe en la Virgen y otros por experimentar el largo trayecto que parte desde la parroquia de Calderón al santuario.

La devoción a la imagen es el motor que anima a los devotos a realizar la caminata de más de 60 kilómetros. La procesión se efectuó los días 21 y 22 del mes pasado.

La caminata forma parte de los grandes eventos religiosos del país; al parecer, se lo realiza desde hace más de 400 años.

Según los creyentes, la caminata tiene como objeto el sacrificio, pues, recorrer tantos kilómetros es una ofrenda para la Virgen para que cumpla las peticiones de sus fieles.

Los devotos caminaron toda la noche y la madrugada. Varios mencionaron que el trayecto es difícil, pues se recorren algunas cuestas que con el esfuerzo y el transcurso de las horas, causan dolor de pies y piernas.

Michael Medina (18) participó en la caminata. Lo hace desde hace 7 años. Dijo que la devoción y la fe son la inspiración para su vida espiritual. “Mi alma es más transparente cuando rezo en el Santuario de El Quinche”, afirmó.

Pero Michael no viajó solo, pues su hermano Luis (16) lo acompañó durante todo el trayecto. Este comentó que siente la misma fe que su hermano. Los 2 hacen todo lo posible para llegar temprano y escuchar la primera misa del día. 

Los hermanos llegaron a la 06:00 y consideraron un tiempo récord su caminata, pues Michael recordó que antes los devotos se arriesgaban al cruzar las montañas que dividen las parroquias Guayllabamba y El Quinche.

“El nuevo trayecto, por el sector de la Victoria, es seguro, aunque el camino se vuelve más largo”, comentó Michael.

El sol está por salir. Los dos jóvenes se sientan y el repique de las campanas les quita el sueño y el agotamiento. Luis dijo que la misa de las 06:00 es la mejor para pedirle ayuda y favores a la Virgen.