Personal de la empresa municipal de obras públicas de Quito compactó ayer el pavimento del estacionamiento del parque La Carolina, ubicado a la altura de las avenidas De Los Shyris y Portugal.

El cambio de la capa de rodadura de 6 parqueaderos del espacio verde arrancó el 21 de mayo y se prevé que concluya la próxima semana.

La intervención genera diversas opiniones. Las personas que llegan al sitio a bordo de vehículos la encuentran acertada porque la tarifa que pagan ($ 0,50 por hora) amerita un buen servicio.

Esa fue la opinión de Luis Arce, quien contó que vive en el barrio Jipijapa (más al norte), quien a diario se transporta en su Grand Vitara SZ, para ahorrar tiempo, a trotar en el parque La Carolina.

Otras personas, sin embargo, consideran innecesaria la obra. Ese es el caso de Gloria Recalde, quien usa el parque como zona de cruce.

A juicio de Recalde, “la ciudad tiene mayores prioridades, que pavimentar los estacionamientos del parque”. La contadora aseguró que en lugar de eso el Cabildo debería preocuparse “de arreglar las calles que están llenas de huecos”.

Con ella coincidió el taxista Roberto Cruz. Puso de ejemplo que cerca del parque, en el cruce de las avenidas Naciones Unidas y De Los Shyris, los conductores disminuyen la velocidad o hacen maniobras para esquivar los desniveles y daños en la calzada.

El conductor añadió que en el sector Los Dos Puentes (centro-sur), en donde reside, las calles Mariscal Sucre y Francisco Barba estuvieron dañadas varios meses “con auténticas zanjas”.

Según Cruz, el estado de las calles capitalinas genera daños en los vehículos, tanto en los neumáticos como en el tipo mecánico. La repavimentación de los estacionamientos de La Carolina se produce al mismo tiempo que la Alcaldía anunció que iniciará una extensa campaña de bacheo.

El gerente de la Empresa Metropolitana de Obras Públicas, Alejandra Larrea, aseguró a la agencia de noticias del Municipio que entre mayo y septiembre “se trabajará en el bacheo de 7.000 de las 11.000 vías de la ciudad”.

Este se aplica, según el funcionario, en lugar de la intervención integral porque este último tipo de trabajo requiere de recursos económicos con los que la ciudad no cuenta actualmente.

La idea del bacheo, sin embargo, no convence a todas las personas por el poco tiempo que dura este tipo de arreglo.

Franklin Achig, morador de Bellavista Alta (en el noroccidente), señaló que la calle principal de la urbanización “fue arreglada (bacheada) hace 4 o 5 meses y hoy nuevamente ya tiene baches”.

El ciudadano dijo que el “bacheo obliga a trabajar varias veces”.

Molestias por estación del Metro

Entre tanto, la construcción de una de las estaciones del Metro en el extremo sur, La Carolina causa inconvenientes a los usuarios del parque. Esto luego de que un cerramiento de malla fuera colocado en el lugar, invadiendo la mayor parte de la acera de la intersección de las avenidas República y Eloy Alfaro.

El espacio reducido impide que dos personas caminen al mismo tiempo o crucen ese punto del espacio público. Esto dificulta el uso del perímetro exterior que hacen atletas y ciclistas.

La presencia de la malla obliga a los transeúntes a alternarse al cruzar o bajar la calle con el consiguiente riesgo, pues a su lado circulan los carros. (I)

La ciudadanía reclama obras para mejorar las vías de la ciudad. En la imagen, un bache en la intersección de las calles 10 de Agosto y Carlos Ibarra. Foto: Fernando Sandoval/ El Telégrafo