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El flujo de agua es normal en todo Quito

El flujo de agua es normal en todo Quito
Foto: Archivo / El Telégrafo
05 de noviembre de 2019 - 00:00 - Redacción Actualidad

Después de 36 horas continuas de trabajo, 120 técnicos y personal operativo de la Empresa Municipal de Agua Potable (Emaps) cambiaron la válvula esférica en la Central de Recuperación de Energía Paluguillo, que pesa entre 17 toneladas y regula la presión del agua que se traslada entre Papallacta y Bellavista, abasteciendo a Quito.

Para la ejecución de la obra la Emaps cortó el sumninistro de agua potable en 55 barrios y zonas del norte de la capital desde la tarde del viernes 1 hasta la noche de este 4 de noviembre de 2019.

Durante este tiempo, la empresa municipal dispuso el funcionamiento de 25 tanqueros para que puedan dotar gratuitamente de agua a los habitantes de esos sectores. Uno de los puntos de abastecimiento fue el Parque de la Juventud, en la calle Luis Vaccari, en Carapungo. Desde ese sitio salieron cerca de 10 tanqueros para repartir agua a las zonas aledañas.

Hasta la tarde de este lunes 4 de noviembre, los moradores se acercaron con baldes, botellones y ollas para abastecerse del líquido vital.

El gerente de Operaciones de la Emaps, Juan Fernando Robalino, recordó que la válvula que se cambió permaneció embodegada durante cinco años y fue instalada en una ardua jornada liderada por el alcalde de Quito, Jorge Yunda Machado, y el gerente de Epmaps, Carlos Uriarte.

El alcalde indicó que el corte de agua se programó para el feriado de noviembre, pues estudios realizados ratifican que el consumo de agua en la urbe baja notablemente durante esas fechas.

En la mañana de este lunes 4 de noviembre, Uriarte señaló que el 90% de los barrios en donde se suspendió el servicio ya contaban con el suministro normal de agua potable. En los tres sectores restantes, barrios altos del noroccidente: Caspigasi, San José de Calderón y la ciudadela Roldós el abastecimiento volvería a la normalidad la noche del lunes 4.

Con el cambio de válvula, las autoridades aseguraron que se garantiza la provisión de agua potable para Quito durante los próximos 20 años. Además la calidad de este líquido es del 99%. (I)

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