El servicio y los precios son la sazón de Restaurante Huguito

Las enseñanzas de sus primeros patronos, quienes se dedicaban a la producción de eventos, han servido para que Hugo Aimacaña administre su propio negocio por alrededor de 20 años.

Así lo asegura este emprendedor, que ha mantenido un restaurante en el bulevar 24 de Mayo, para quien el consejo principal fue que lo primero siempre debe ser dar un buen servicio.

Que alguien emprenda y, posteriormente, maneje un negocio de comida no tendría nada de especial si no fuese por la particularidad de los precios.

Restaurante Huguito sigue ofreciendo, como lo hace desde hace muchos años, desayunos y almuerzos a $  1.

Una pancarta ubicada afuera del local especifica que el pago del importe significa recibir “almuerzos con carne”. Aplica en ello los conocimientos en administración y marketing que logró con sus estudios.

En una época en la que una comida cuesta $ 2, $ 3 e incluso más, precios como los que ofrece Hugo son una rareza en Quito.

El cotopaxense elude responder cuál es el secreto que le permite mantener las tarifas en su negocio. Insiste constantemente en la priorización del servicio.

Una muestra es la limpieza del local, los utensilios y detalles pequeños de decoración en sillas y mesas.

Una vez a la semana va al cercano mercado de San Roque y obtiene los productos que necesita. Tiene proveedores conocidos, pero se  reserva su identidad.

Al final, sea por causa del precio, el servicio o la sazón de la comida, vende hasta 200 almuerzos diarios. (I)