El pase del Niño devuelve la religiosidad a Navidad
El ambiente religioso y la alegría de la Navidad invadió ayer las calles de la ciudad, debido a los tradicionales “pases del Niño” que realizaron colegios, escuelas, empresas e instituciones.
A estos se sumaron los propietarios de los Centros Comerciales del Ahorro, que se dieron cita en las faldas del Panecillo, en el centro de la ciudad, para iniciar desde ahí el recorrido hasta la cúspide de la loma. Con bandas de pueblo, capariches, comparsas, pastores, ángeles, reyes magos, zanqueros y demás personajes de la época navideña se realizó el “pase del Niño”.
Raquel Pineda cerró su negocio por un día para integrarse a la comparsa. Con un traje típico de vistosos colores salió a las calles para expresar su fe y su alegría por la llegada de la Navidad. “Los ‘pases del Niño’ son algo hermoso que no podemos perder porque es una celebración de fe que le hacemos al Niño Jesús”, dijo.
Unión
Como ella, representantes de los 10 centros comerciales se unieron para festejar un cumpleaños más del “Niño Comerciante”. Los vendedores caminaron y bailaron junto a una imagen del Divino Niño, que fue transportado junto a representaciones de Jesús y María, que realizaron el recorrido en burro. Esta fue una forma de recrear la manera de cómo se realizaban las caminatas.
Anabel Hermosa, directora de la Unidad Ejecutora del Comercio Popular, explicó que esta representación se realiza desde hace ocho años. “Este año se incorporaron los Centros Comerciales del Ahorro del Sur y hemos nombrado en cada ‘pase del Niño’ a una escuela para que sea prioste”, expresó la funcionaria.
Recorrido
Las comparsas, acompañadas por una banda de pueblo recorrieron las estrechas calles que llevan a la cima del Panecillo. Cientos de niños siguieron la procesión en medio del intenso sol que cobijó la capital en horas de la mañana.
Piedad Sarabía vive en el sector y fue una de los priostes que este año rindió homenaje al Niño Jesús. Ella afirma que los desfiles navideños unen a los moradores y ayudan a compartir en familia las fechas especiales de fin de año.
Además, el objetivo de estas actividades es fortalecer la solidaridad y las tradiciones de los comerciantes, aseveró Hermosa.
El Padre Holger Paz, quien acompañó en la celebración de la misa, dijo que las reuniones en torno al “pase del Niño” sirven para visibilizar a los actores sociales como parte fundamental del desarrollo de la cultura en Quito y la religiosidad es un ingrediente principal.
Zoila Bustillos manifestó que es una alegría ser parte de la caminata, porque llegan para agradecer por los favores realizados durante el año y a la vez a pedirle al Niño que no les falte salud ni trabajo en el 2012.
Este año los comerciantes recolectaron 1.500 obsequios que fueron entregados a los niños de varios sectores de la ciudad.
Los integrantes de la banda de pueblo “Paquito’s Band” fueron los encargados de ponerle ritmo al “pase del Niño”. “A nosotros nos contratan los señores del centro comercial, pero siempre venimos con alegría por ser la fiesta de Navidad”, señaló Luis Benjamín Tumipamba, mientras tomaba su trompeta para entonar un popular villancico.
Algarabía
Los niños fueron los actores importantes en esta tradición. “Yo me vestí de pastor para el desfile. Esta es la primera vez que salgo en la comparsa y estoy feliz”, dijo Jonathan Hernández, de 11 años. Su anhelo es poder pasar la nochebuena en compañía de sus padres y su hermano.
Con este acto se cierra una parte de la Navidad. Mientras cientos de personas aún realizan sus compras navideñas de última hora, la mayoría se alista para la cena de medianoche y celebrar en familia el nacimiento del Niño Jesús.