El cierre del tránsito iniciado anoche en la av. 5 de Junio, entre Rodrigo de Chávez y Gatazo, se suma a una serie de medidas similares implementadas desde inicios de año.

La más reciente restricción se aplicará, según el Municipio, durante 2 meses para trabajos de consolidación del terreno cercano a la estación La Magdalena del Metro.

Ese sector del centro-sur capitalino es el más afectado de la ciudad por los cortes de circulación vehicular: 4 en total. El primero afecta 3 carriles de la av. Rodrigo de Chávez, entre Pedro de Alfaro y Galte, desde el 30 de enero pasado.

Los trabajos de preparación del suelo para el paso de la tuneladora Luz de América estaba previsto que duraran 4 meses. Sin embargo, hasta ayer no concluían.

Así mismo, desde el 24 de abril están cerradas la calle Galte, entre Rodrigo de Chávez y Chasqui, y esta última, entre Francisco Barba y Galte. En esos 2 puntos se realiza el desvío de un colector de aguas servidas y los tramos deben ser reabiertos a fines de agosto.

Al mediodía de ayer, la empresa municipal Metro de Quito anunció el cierre de un carril de norte a sur y otro en sentido contrario de la av. teniente Hugo Ortiz, 100 metros al sur del redondel de El Calzado (sur).

Esta intervención se aplicará desde mañana y tendrá una duración de 5 meses. El objetivo es construir una de las salidas de emergencia que tendrá el túnel del sistema subterráneo de transporte. También en el sur, un tramo de la calle Miguel Carrión fue cerrado un mes para permitir la construcción de la rampa de vaciado de la estación El Recreo, atrás de la cual se iniciaron los trabajos.

En el centro de la ciudad, las calles adyacentes a la plaza de San Francisco están cerradas hasta mediados de agosto, por la construcción de una parada en ese sitio.

Y del mismo modo, no hay paso por el viaducto del bulevar 24 de Mayo desde el 12 de junio y durante 18 meses por labores relacionadas con la estación San Francisco.

Dos días después, un tramo de la av. Eloy Alfaro se cerró por un año.

Otro sector de Quito por el que la circulación está bloqueada es la av. Gran Colombia, entre Nicolás Espinosa y Luis Sodiro, donde se construye otra estación.

Así mismo, desde el viernes pasado se encuentra cerrado el carril derecho de la av. Naciones Unidas, a la altura de la calle Japón (CCNU), para permitir la edificación de los ingresos a la estación Iñaquito.

Esta intervención durará un mes y posteriormente se cerrará otro carril de la propia NN.UU.

Estos hechos, aunque son comprendidos por la ciudadanía debido a la magnitud de la obra, no dejan de causar molestias.

César Mercado, habitante de La Villaflora (centro-sur), se quejó de que el plazo del cierre de la av. Rodrigo de Chávez no se cumpliera.

“Los cierres aumentan en el sur, lo que complica obligatoriamente la circulación. Hasta ahora, el uso de la (av.) 5 de Junio era una alternativa para moverse de sur a norte y viceversa; pero ahora la cierran”.

William Pizarro, quien vive en el barrio La Tola, se queja de que tras el cierre total de la av. Gran Colombia el 21 de junio, los recorridos de algunas líneas se han acortado “sin razón, lo que nos obliga a hacer trasbordos y aumentar el precio del transporte”. (I)