Una inversión de $ 40 millones requirió el acondicionamiento del Centro Especializado La Mariscal, en el norte de Quito. Esta obra, del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), tiene un 80% de avance y está previsto que se entregue a finales de este año.

El Centro está distribuido en 7 pisos y 3 subsuelos. Contará con servicios de diálisis, gastroenterología, imagenología, rehabilitación, odontología, laboratorios, consultorios y cardiología. Tendrá una capacidad de atención para un millón de personas por año, lo que equivale a 5 mil por día.

El área de construcción es de 22.000 m2, que representa casi la mitad del hospital Carlos Andrade Marín de la capital.

La ciudadana Francia Cuenca destacó la importancia de la inversión de los recursos públicos en la construcción de obras en salud. “El desarrollo que ha tenido el país en el tema de salud es destacado y eso se evidencia en este tipo de obras que no solo cuentan con las mejores instalaciones y equipamiento, sino también con el mejor personal de salud”.

El presidente Rafael Correa recorrió ayer la obra para constatar los avances y también informará a la ciudadanía sobre los beneficios de esta casa de salud.

El presidente del directorio del IESS, Richard Espinosa, remarcó que solo en el área de diálisis se espera una presencia anual cercana a las 31 mil personas.

A través de este hospital se espera descongestionar al hospital Andrade Marín y disminuir al menos un 27% las derivaciones a centros privados que realiza el IESS.

Luego del recorrido, el gobernante se trasladó al colegio Montúfar, en el sur de Quito, para supervisar las obras de mejoramiento. La infraestructura presenta un avance del 68% y se espera que hasta agosto esté concluida. La inversión aquí es de alrededor de $ 1’5 millones. “Para inicio del nuevo período escolar (en el régimen Sierra) los jóvenes que estudien aquí encontrarán una infraestructura adecuada para que puedan aprender con calidad”, mencionó Wilson Ortega, subsecretario de Educación.

La infraestructura del plantel tiene más de 71 años y no ha recibido ningún mantenimiento por lo que desde noviembre del año pasado se trabaja en la intervención. “Recibir clases en aulas temporales nos creó inconvenientes, pero sabemos que lo más importante es la calidad de los conocimientos que recibimos”, afirmó Pablo Nogales, estudiante de la institución.

El presidente Rafael Correa dijo que lo ideal es que exista una sola jornada de estudios matutina y que en la tarde se desarrollen las actividades extraescolares. “Para que eso se vuelva realidad necesitamos al menos 900 unidades educativas del milenio y lo que podremos edificar hasta 2017 son solo 300. Pero tengan por seguro que el país tendrá la mejor educación de la región y del mundo”, afirmó Correa. (I)

$ 600 millones se retiraron tras la ola de rumores

El presidente de la República, Rafael Correa, en una entrevista a radio Vox, en Quito, reveló que los rumores sobre una supuesta desdolarización en Ecuador motivaron a que haya un inusual retiro de depósitos bancarios.

“Los rumores de la desdolarización fueron enormes, tuvimos $ 600 millones en retiro de depósitos, pero la economía aguantó”, lamentó. El Mandatario explicó que esto forma parte de una estrategia de la oposición que busca desestabilizar al Gobierno.

Debido a este panorama, Correa adelantó que “probablemente” en el segundo trimestre el país tenga una tasa de crecimiento “muy pequeña” porque cuando se retiran los depósitos de los bancos hay menos créditos en el mercado. “Nos obligan a llenar la Plaza Grande este jueves, debido a que han convocado movilizaciones el FUT y el ‘irresponsable’ de Andrés Páez en el parque El Arbolito, cerca de Carondelet”, informó el Presidente.

El jueves habrá nuevas movilizaciones, por lo que PAIS ha convocado a su militancia en la Plaza Grande. La semana pasada el Mandatario dijo que su movimiento debe tener la capacidad de activar a sus simpatizantes en 30 minutos para desplazarse a un determinado lugar. “Yo les advertí hace un año que hay toda una campaña organizada, articulada para desgastarnos, la llamé la restauración conservadora”. (I)