El ave emblemática de la ciudad en 65 esculturas
Pintores consagrados y colectivos de artistas elaboraron y decoraron 65 esculturas de 1,7 metros de alto, con diferentes estilos y mensajes que buscan conservar el ave emblemática de la capital: el colibrí.
Delia Iza llegó al bulevar de la avenida las Naciones Unidas, en el parque la Carolina, al norte de la ciudad, y se encontró con una serie de esculturas que le llamó la atención.
Al igual que ella varias personas utilizaron sus cámaras y celulares para llevarse un recuerdo de las pintorescas aves que son exhibidas al público desde ayer.
Las 65 esculturas nacieron de una maqueta del artista ecuatoriano Nixon Córdova, quien hizo una fusión de varias especies de colibríes que existen en los bosques, quebradas y laderas de la ciudad.
Las obras se encuentran distribuidas a lo largo del bulevar y recrean la diversidad en la identidad que se conmemora con los festejos de la fundación capitalina.
La concejala María Sol Corral impulsó la iniciativa como una muestra de conservación de una de las aves importantes para el ecosistema andino. Además porque sus vistosos colores imprimen alegría a las celebraciones.
Juan Manuel Carrión, coordinador general del proyecto, detalla que el proyecto “Quito Jardín de Quindes” acerca a los habitantes al conocimiento y apropiación del Patrimonio Natural como un elemento fundamental de identidad colectiva y potencial para el turismo local.
El pintor Edwin Valle tardó seis días en dar forma a un colibrí que lo denominó “Preservación, no extinción”, en el que plasma la idea de cuidar las quebradas que es el hábitat de varias especies nativas.
"Esto es una mezcla entre el arte urbano y la conciencia ambiental, relacionado con nuestro patrimonio natural”, dijo.