Diez paradas en el sur, sin uso y deterioradas
Las paradas del Trolebús continúan sin prestar servicio al sur de la ciudad, desde San Diego hasta Fundeportes. Las vías de esta ruta fueron repavimentadas con hormigón, de acuerdo con el plan de mantenimiento de la ruta, pero desde 2008 no brindan ningún servicio a la ciudadanía.
Al interior de la parada ubicada a la altura de la calle Alfredo Escudero, en el ingreso a Caminos del Sur, un guardia confirmó que esta construcción permanece cerrada para el servicio de transporte y que no tiene fecha de apertura.
El hombre informó que la vigilancia la realiza las 24 horas, ya que por las noches los antisociales intentan ingresar a dormir y golpean los vidrios. Sin embargo, durante el recorrido se confirmó que hay paradas que no tienen personal de seguridad y en los ingresos la maleza es evidente, debido a la falta de mantenimiento.
Según Carlos Poveda, gerente de la Empresa Metropolitana de Transporte, los andenes y los carriles exclusivos en la avenida Mariscal Sucre fueron construidos en la administración del ex alcalde Paco Moncayo, en 2008, como obras para el sistema de transporte, pero sin un plan de ejecución. “Estas paradas no entran en la ampliación de servicios del Trolebús”.
Durante una inspección realizada por personal de la Empresa Metropolitana de Transporte, se evidenció que la infraestructura de las paradas tiene algunas fallas de ubicación que no están acordes con la movilidad vehícular y peatonal, aspectos que, desde luego, debieron ser analizados antes de su construcción.
Para Marco Sarmiento, morador de la calle Ajaví, la obra no representa ningún beneficio para la comunidad, porque durante los dos primeros años no se permitió que vehículos particulares transitaran por la vía, lo cual causó congestión.
Ahora, después de tres años, siguen sin servir a la colectividad. “Gastan el dinero de nuestros impuestos para obras que no nos benefician y solo se están deteriorando”, sentenció.
Vicente Núñez, otro morador, dijo que no han recibido información de los buses que circularán por la zona, pero aduce que será mejor si se regulan las paradas de los transportes convencionales del sector.
Poveda aclaró que se está trabajando en la coordinación con los transportistas para poner en funcionamiento las paradas y, de llegar a un acuerdo, se hará un levantamiento, mantenimiento, arreglos y acondicionamiento de las áreas para que estén al servicio de la gente.
Se prevé que, a finales del primer semestre de este año, las paradas sirvan para unir al sur de la ciudad con las rutas alimentadoras que tendrán su parada en el Seminario Mayor. A esta zona irán buses articulados que tienen mayor capacidad operativa.