Cuatro años después, en el parque Equinoccial las adecuaciones no concluyen

En agosto de 2013, el exalcalde Augusto Barrera inauguró el Parque Metropolitano Equinoccial, destinado a la recreación de cientos de pomasqueños.

El centro abarca una extensión de 18 hectáreas, adquiridas por el Gobierno Nacional a la Contraloría General del Estado (CGE), como parte del proceso de recuperación de espacios públicos en beneficio de la población.

El proyecto consistió en convertir predios destinados a funcionarios públicos, en áreas abiertas para la comunidad con ingreso gratuito.

De esta forma, la ciudadanía cuenta con juegos infantiles, canchas de fútbol, voley, baloncesto y tenis, una laguna artificial y un área de picnic, ubicados en el kilómetro 9 de la av. Manuel Córdova Galarza, vía a la Mitad del Mundo.

El plan de apertura incluyó no solo la colocación de cerramiento, mantenimiento de las áreas verdes, canchas, equipamientos deportivos y juegos infantiles, sino también trabajos de limpieza, adecuación de baterías sanitarias, implementación de parqueaderos, así como la creación de un sistema de alcantarillado que se conecte con la red pública y mantenimiento del sistema de alumbrado.

La ejecución de esta obra significó una inversión de $ 406.706 por parte del Municipio. Sin embargo, casi 4 años después de su apertura, el parque aún no cuenta con todos los espacios ofrecidos; la recuperación del área húmeda aún está pendiente.

“No sabía que el parque tenía espacio para piscina, pero sería bueno que la arreglen. Ahí sí sería un parque completo”, comenta Martha Zurita, moradora del barrio La Pampa, que usualmente visita el parque con su nieta.

El área húmeda, según explicó un funcionario que prefirió no identificarse, no ha podido entrar en funcionamiento debido a la falta de recursos para su adecuación. Además, el acuerdo que manejan Inmobiliar, el Municipio de Quito y la CGE, contempla que algunos espacios se mantendrán bajo la administración de la Contraloría, por lo que se debe esclarecer si la zona húmeda también forma parte del espacio destinado a la ciudadanía.

Sin embargo, en el resto de las instalaciones se ejecutan trabajos de mantenimiento básico, como corte de césped y recolección de basura.

Andrea Ruiz, usuaria, señala que durante el último año los cuidados brindados al parque han disminuido, sobre todo en el área de picnic y asados. “Ahora los asaderos están rotos y no les han arreglado. También hay restos de carbón y basura”, dice.

Por su parte, Christian Mena, quien asiste casi todas las tardes a jugar fútbol o baloncesto, resalta el buen estado de las canchas.

Ante el comentario del mal estado de otros servicios, Mena indica que es evidente el menor cuidado de ciertos espacios, y lo atribuye a su mayor utilización.

“Si no han arreglado las piscinas, por ejemplo, debe ser porque no las van a usar tanto como las canchas o los juegos para niños. En ese caso yo prefiero que mantengan en buen estado los espacios que sí se utilizan”.

Su hermano, Édison, muestra preocupación al suponer que los arreglos representarán el pago del ingreso al parque: “Yo no estaría de acuerdo en que cobre entrada, por ejemplo”, indica.

De cualquier forma, los usuarios esperan que los trabajos de mantenimiento del parque, que según el Municipio beneficia a 235 mil personas, sean más frecuentes.
“Deben cuidarlo más, sobre todo ahora que la vía va a estar buena y van a venir más personas”, dice Martha Zurita, refiriéndose a la extensión de la av. Simón Bolívar que pasa por uno de los accesos del complejo. (I)

El área de asados es una de las más deterioradas. Restos de carbón y basura son evidentes en los asaderos que están rotos en la mayoría de casos. Esto dificulta su utilización por parte de los usuarios. Foto: John Guevara / EL TELÉGRAFO