Durante la sesión solemne realizada este martes en el Teatro Sucre, en el Centro Histórico de la capital, el presidente de la República, Rafael Correa, dijo que para mantener “lo solemne de la sesión, considerando que ya se dijo demasiado, voy a cortar mi discurso y la parte que hablo de lo que el Gobierno Central ha hecho por Quito se la envío por escrito para que quede registrado en el acta de la sesión”. Al pronunciar estas palabras, Correa dejó ver su evidente malestar por el prolongado discurso del alcalde Mauricio Rodas, quien se tomó más de 2 horas para exponer los trabajos realizados por su administración. 

En su discurso, el mandatario aclaró que toda la obra emprendida por el Cabildo quiteño es posible gracias a las asignaciones efectuadas por el Gobierno Nacional. Desde 2007 al 2016 se entregaron por concepto de asignaciones de ley al Municipio —actualmente administrado por Mauricio Rodas—$ 2.617,72 millones.

Desde 2007 Quito se constituyó en una ciudad modelo de crecimiento y con el apoyo del Gobierno ha crecido y dinamizado su economía. Es la capital con la mayor cantidad de megaproyectos en ejecución a nivel regional.

Durante el acto, Correa recordó que en 2006, Quito recibió apenas $162 millones por asignaciones del Gobierno Central, pero en el año 2015 recibió $330 millones, más del doble de los recursos que se entregaban antes de su gobierno. “Este es mi último mensaje a Quito como Presidente; voy a extrañar las serenatas, pero les aseguro que no echaré de menos a las sesiones solemnes”, indicó durante su intervención.

El presidente aprovechó la sesión solemne para dar a conocer la importancia del proyecto para terminar con la “especulación inmobiliaria que genera ganancias ilegítimas”. (I)