EL PERSONAJE: Propietario de la Casa Artista y del teatro Puerta del Sol
Coleccionista, soñador y loco, así es Julio Álvarez
Aunque los aparente muy bien, Julio Álvarez, más conocido como el ‘loco soñador’ tiene 80 años y uno de sus secretos para seguir “en pie y promoviendo la cultura” es la devoción que tiene por la Virgen de Guadalupe.
Su casa, ubicada en la calle García Moreno, en el Centro Histórico de Quito, es la sede cada sábado (14:00) de presentaciones artísticas bastante particulares.
La Casa del Artista tiene un su patio principal un escenario para las presentaciones. Álvarez reconoce que hay 2 condiciones para subir allí: no tener fama y ser artista nacional, aunque a veces ha contado con la participación de músicos latinoamericanos.
Además de albergar a artistas sin fama, este hombre guarda en esa infraestructura patrimonial más de 10 habitaciones llenas de libros. Obras como la Historia de la Cultura Ecuatoriana, la colección Ariel y los textos de Juan Montalvo como los Siete Tratados, El Cosmopolita y Las Catilinarias.
“No he leído todos los libros. Hay muchísimos”.
También tiene espacio para la colección de estampillas y monedas. Sus 2 hijos, en cambio, se dedican a guardar las revistas de los mundiales de fútbol.
Este abogado de profesión y exconcejal de Quito es propietario del Teatro Puerta del Sol, en el sector de la 24 de Mayo.
En los años ochenta, ese predio era famoso, por eso contrató al talentoso animador Byron Meza, el ‘Búho’. “Que buenos tiempos, carajo. Además, aquí se presentaron cada sábado, artistas de manera gratuita, con animadores profesionales y excelente amplificación”. (I)