Checa busca recuperar su memoria
Tránsito Carvajal tomó de la mano a su nieta Valery y ambas salieron a caminar. Recorrieron un antiguo camino de la parroquia quiteña Checa. A lo largo del sendero, la niña recogía hojas y algunas semillas de pino, mientras su abuela se detenía a observar la profunda quebrada que se encontraba entre los árboles de eucalipto. A lo lejos se divisaba la iglesia de El Quinche y varias viviendas de la parroquia vecina.
“Yo vivo más de 30 años en Checa. Es una parroquia tranquila y amigable. El sendero es conocido por toda la comunidad y algunas personas caminan por este sitio. En el verano, a los chicos les gusta pasear en bicicleta”, señaló la mujer.
Por ello, uno de los proyectos en el que está empeñada la Junta Parroquial del sector es rehabilitar la ruta que cruza la zona, desde la calle del Molino, al lado nororiental, hasta la 3 de Mayo, en el estadio. El tramo tiene una extensión de tres kilómetros.
“Este es un camino antiguo, que incluso se cree que era utilizado por los chasquis, antiguos caminantes y recaderos en la época de los Quitus y los Incas. Por eso nuestro afán es recuperar la (llamada) ruta rústica, puesto que en la extensión de la misma se encuentran también las primeras casas que se construyeron en la parroquia. Por ejemplo, están la primera panadería, alfarería y herrería que se establecieron en la zona de Checa hace más de 100 años”, señaló Julio López, presidente del gobierno parroquial.
Valentín Calle, otro morador y quien trabaja en una empresa florícola, comentó que recuperar la ruta significa también recobrar la identidad de la parroquia.
Calle recordó que de pequeño jugaba en la senda y que cuando se tardaba su madre lo regañaba y le repetía la leyenda, según la cual, en el sitio aparecían duendes.
Actualmente, la junta arregla el sector y en los próximos meses como parte del proyecto se colocarán señalética en los bordes del camino y seguridades para los peatones y los ciclistas, especialmente en los filos de la vía que dan a la quebrada.
Pero el proyecto también busca incentivar a los moradores de la zona a que practiquen deportes, pues con el sendero ya terminado, las autoridades esperan que la ruta rústica se convierta en un atractivo para los moradores y un pretexto para que hagan ciclismo o realicen caminata en familia.
La Junta Parroquial en este proyecto ha invertido 15.000 dólares en maquinaria, señalización y restauración del sendero.
Luis Carpio, habitante del lugar, comentó que las anteriores administraciones se olvidaron de algo primordial para la parroquia y es la creación de más espacios verdes. Por lo que considera que recuperar el camino antiguo será una buena opción ambiental para los habitantes de la zona.
De hecho, Checa cuenta con pocos espacios verdes. Uno de los principales es el Corredor Cultural del Parque Ecológico, que se encuentra al sur del casco urbano parroquial.
“El tramo es de mucha importancia para los habitantes de la parroquia, pues aquí encontramos características culturales de nuestra comunidad. Pero tenemos un inconveniente relacionado con el plan vial parroquial, que realiza la Secretaría de Territorio del Municipio pues, según una ordenanza, la vía debe ser de 14 metros de ancho. Entonces, al pasar la ruta por el sector habría que derrocar las casas y eso significa quedarnos sin patrimonio. Es necesario que no lo hagan y más bien, se recuperen los inmuebles. Esperamos que escuchen nuestro pedido”, indicó López.
Sobre este tema, los moradores coinciden en que aunque la obra es importante se espera que el Municipio de Quito apoye para que se preserven las pocas viviendas patrimoniales que han quedado en el lugar.