Cabildo: $ 40 millones para asumir tránsito y transporte
El Municipio de Quito planificará, regulará y controlará el tránsito, el transporte terrestre y la seguridad vial desde el próximo año, informó ayer el alcalde Augusto Barrera.
La decisión fue tomada el pasado 26 de abril, por el Consejo Nacional de Competencias (CNC), el cual resolvió que la administración y los controles que hasta el momento estaban a cargo de la Policía Nacional y la Agencia Nacional de Tránsito, incluyendo en la vía pública y los procesos de matriculación vehicular, sean transferidos a las respectivas municipalidades, en la que se incluye la de Quito.
Según el alcalde Barrera, la transferencia total de las competencias en materia de tránsito servirá para conseguir una movilidad más segura para los habitantes de la ciudad.
“En 1993 el Municipio adquirió algunas competencias con referencia al tránsito, pero con eso no se puede hacer mucho”, dijo. Además agregó que para la administración del tránsito la municipalidad solo cuenta con un presupuesto de 3 millones, “no alcanzaba para nada”, señaló. Con la transferencia de competencias recibirá 40 millones.
El problema de no tener el control y los recursos hicieron que la administración municipal actual realizara el pedido de transferencia, ya que la capital tiene alrededor de 2’250.000 habitantes, 450 mil vehículos y un nivel de crecimiento de cerca de 60 mil personas cada año, y la movilidad “tiene que mejorar”, dijo Barrera. El Municipio planificará, regulará y controlará el tránsito, transporte y la seguridad vial.
Barrera contó que la seguridad vial dentro de una ciudad es diferente a la de la carretera, y ahora se pondrá más énfasis en el tema “porque es vital”.
Para realizar el trabajo la municipalidad creará la Agencia Civil de Control de Tránsito, que contará con 1.500 agentes, que estarán equipados con tecnología adecuada, como sistemas de cámaras, radares y sistemas informáticos. Se estructurará una base única de datos vehiculares, lo que permitirá que la entidad cuente con la historia de cada vehículo que transita en Quito, además de información del conductor.
Los agentes recibirán instrucción por aproximadamente nueve meses, y “será un sistema de formación alto en nivel de hondarez”. Además la municipalidad recaudará los costos de matriculación y multas; esto será para invertir en el mismo tema.
La agencia entrará a operar en abril de 2013; hasta ese entonces el encargado del tránsito seguirá siendo la Policía Nacional y la Agencia Nacional de Tránsito.
Barrera solicitó a estas instituciones que realicen un trabajo a conciencia, puesto que al saber que pasarán a otras entidades podrían descuidar su trabajo.
Al momento, el Municipio tiene facultad para controlar regulaciones dictadas a través de ordenanzas (pico y placa, revisión técnica, mal estacionamiento) y al transporte urbano e interparroquial. Las competencias que faltaban de controlar eran las infracciones contempladas en la Ley de Tránsito: buses intercantonales, exceso de velocidad, irrespeto de semáforos, prácticas de conducción prohibidas, estado de embriaguez.