80 articulados mejorarán operaciones del Corredor
En mayo el Corredor Sur Occidental cumplirá un año de operaciones. La ruta de transporte público conecta a los moradores del sur de Quito con el centro-norte de la urbe. El sistema está integrado por 24 paradas distribuidas a lo largo de la avenida Mariscal Sucre. En cada parada hay tres puertas de acceso y en cada una de ellas se toma una ruta de transporte específica.
Pero en las horas pico: 07:00 - 08:00, 12:30 - 1 4:00, 18:00 - 19:00 el principal problema de los usuarios es subir a las unidades, debido a la aglomeración de personas y del desorden, pues no hay filas para las distintas líneas de transporte.
Luis Parra, quien utiliza el servicio a diario desde la parada del Hospital del Seguro hasta el barrio Santa Bárbara, en el sur de Quito, comentó que en una ocasión casi cae a la calzada de un empujón cuando intentaba subir al vehículo. “A esta hora (18:15) es difícil tomar un bus”.
Similar criterio comparte Inés Cando, quien se dirige hacia la Mena Dos: “Aquí no hay filas, debemos estar atentos a que llegue el bus que nos conviene y empujar a la gente para subir”.
El mismo problema se repite en paradas ubicadas en El Tejar, San Roque, La Mascota y La Magdalena.
Para Eugenia Peña, usuaria frecuente del sistema, la aglomeración se debe a que es el único medio de movilización para la zona. “El servicio es regular, la transportación de los buses es rápida pero solo desde Quitumbe hasta la Rodrigo de Chávez, luego se vuelve lento por el tráfico en sectores como La Necochea y San Roque”, anotó.
En la actualidad el sistema opera con 295 unidades articuladas. Son buses tipo que cuentan con una puerta flexible al lado izquierdo. Los destinos son diversos y el sistema comprende 26 circuitos o líneas de transportación (una troncal que va desde Quitumbe hasta la Universidad Central, tres líneas Alimentadoras que van desde Quitumbe hacia los barrios cercanos como Los Cóndores y 22 ramales que llegan a más de 14 barrios del sur de la ciudad.
Carlos Poveda, gerente de la Empresa Pública Metropolitana de Transporte de Pasajeros de Quito, explicó que este inconveniente podría solucionarse en diciembre de este año, cuando empiecen a operar 80 buses articulados similares a los que tiene la Ecovía o Trolebús. “El sistema pasará a ser troncoalimentado, es decir, que en el corredor se moverán los articulados y los buses tipos serán alimentadores para los barrios del sector, con esto se ocuparán todas las puertas de las paradas y habrá un solo circuito”.
La inversión es de 23 millones de dólares. Las posibles terminales estarían ubicados en Quitumbe, La Santiago, Miraflores y el Seminario Mayor.
Del mismo modo, Poveda reconoció que algunas de las paradas están mal construidas y que por ello lucen destruidas, pero estarán mejoradas para cuando el sistema opere con los buses articulados.
Actualmente el Cabildo invierte 400 dólares mensuales en el mantenimiento de cada estación, rubro que incluye la limpieza.
El Corredor moviliza al día a 220 mil pasajeros del sur al norte y viceversa.