70 empresas exponen sus propuestas ambientales
La Ecoferia Quito Verde se inauguró ayer, en el Centro de Exposiciones Quito, en la que participan 70 stands de comunidades, escuelas y empresas públicas y privadas del país para exponer proyectos de cuidado ambiental.
Según Ramiro Morejón, secretario de Ambiente del Municipio, este es un espacio para que se conozca el trabajo que realizan las entidades públicas, privadas y la comunidad para cuidar el ambiente.
Agregó que estos proyectos pueden ser acogidos por la ciudadanía para hacerlas prácticas cotidianas. El funcionario explicó que es el marco oportuno para conocer el trabajo que lleva a cabo la entidad y las políticas ambientales favorable para los ciudadanos. Entre los proyectos están los monitoreos de ruido, aire y radiación UV, que se realiza diariamente en la capital.
Con respecto a la radiación UV, explicó que diariamente en la página web de la institución las personas pueden consultar en qué nivel se encuentra y las medidas de precauciones que se deben adoptar. Recordó que en la actualidad los problemas de cáncer de piel son más comunes y es necesario poner énfasis en la prevención.
Entre las actividades cotidianas que se pueden acoger de los proyectos que se exhiben están las terrazas verdes, que permiten plantar en un pequeño espacio una serie de especies, lo que ayuda a generar oxígeno. Esta iniciativa se aplicó en las oficinas y terrazas del Municipio, lo que se busca es que en los hogares también destinen un espacio, comentó el funcionario.
Entre los stands está la propuesta de la Asociación de Reciclaje Vida Nueva, que es un grupo que acoge a 500 familias que viven del reciclaje en los centros de acopio y en la calle. Ellos muestran los objetos que han construido con artículos reciclados, por ejemplo, un cisne elaborado con papel, juguetes que necesitaban arreglos, CD que sirven de adornos, etc.
“Lo que queremos demostrar es que el trabajo de los recicladores es valioso, pues evitamos que los lugares de acopio de basura se llenen o colapsen”, sostuvo Iván Chango, representante de la entidad.
La comunidad también tiene su espacio en la Ecoferia. Los moradores del sector de Tola Chica, ubicados al suroccidente del volcán inactivo Ilaló, iniciaron en el 2000 un proyecto de viveros comunitarios para reforestar con plantas nativas al volcán.
La iniciativa inició como una forma de recuperar la identidad de los habitantes y su slogan es “curar el Ilaló”. Hasta el momento han cultivado aproximadamente 30 mil plantas nativas. “El propósito de mostrar nuestro trabajo es que otras comunidades tomen nuestra experiencia y empiecen a hacer lo mismo”, contó Gerardo Simbaña, morador de la Tola Chica.
También exponen sus trabajos algunas reservas ecológicas y los sectores protegidos de la capital. La comunidad de Pachijal, ubicada en la parroquia de Pacto, al noroccidente de Quito, es un ejemplo.