Los lustrabotas que hace décadas laboran en el pasaje Arzobispal se mudaron, este 21 de enero, temporalmente al tramo de la calle Chile entre Venezuela y Guayaquil.

Esto sucedió porque la plaza de la Independencia, en el centro de Quito, fue acordonada por la Policía en prevención de manifestaciones.

La medida, sin embargo, no evitó que unos 200 taxistas no regularizados se apostaran afuera del Municipio capitalino para exigir el reinicio del proceso de legalización, suspendido desde noviembre.

Una veintena llegó a la también llamada plaza Grande con carpas para permanecer allí si el Gobierno local no respondía favorablemente su pedido este lunes.

Richard Carrillo, de la precompañía de taxis Quito City, aseguró que la decisión de incorporarse a la medida de protesta fue voluntaria y se adoptó en una asamblea realizada el domingo.

Los manifestantes integran el primer grupo de aspirantes que recibió el certificado de idoneidad para avanzar en el proceso de regularización iniciado en agosto de 2017.

En diciembre de ese año, el Concejo Metropolitano autorizó que el documento fuera entregado a más de 10.000 postulantes. La cifra excede el cupo de 8.693 unidades aprobado por el legislativo local para que se integren al servicio de alquiler de automóviles.

Además, el 31 de octubre del año pasado, el Concejo permitió que quienes consideraban que fueron descalificados por razones que no eran de fondo, pudieran postular nuevamente.

Esto llevó a que, en la actualidad, el número de aspirantes a un cupo con certificado de idoneidad se acerque a los 13.000.

Un grupo de taxistas no regularizados se reunió el lunes 21 de enero con el secretario metropolitano de Movilidad, Alfredo León, para buscar una salida.

El funcionario les dijo que el tema será analizado el miércoles 23 de enero por la Comisión de Movilidad y el viernes 25 de enero habría sesión del Concejo.

Esto fue rechazado y el gremio declaró el inicio de la huelga de hambre. (I)