Una relación imprescindible: Instituciones públicas y Academia
El momento actual del Derecho exige innovación continua y por supuesto una relación eficaz entre instituciones públicas y academia; es decir, un diálogo efectivo en donde cada uno aporte desde sus dominios y competencias a fin de enriquecer la práctica jurídica.
La relación descrita puede ser leída desde muchas aristas, de las cuales, quiero resaltar algunas:
Formación de profesionales que aporten a la sociedad desde su práctica ética, conocimiento, innovación y por supuesto, vocación de servicio al Estado ecuatoriano.
Investigación crítica y técnica sobre temas de interés científico y social, inclusive señalando errores cometidos por la administración pública y apuntalando aciertos, este es uno de los roles más destacados de la academia.
Vinculación con la sociedad, como un aporte en beneficio de los sectores más vulnerables, en donde la articulación del componente académico curricular, de investigación y de innovación se entrelazan para brindar atención a los sectores más necesitados de la sociedad, además de posibilitar una práctica preprofesional efectiva del estudiante en su ámbito laboral.
En ese sentido, la Fiscalía General del Estado y la Universidad Internacional del Ecuador (UIDE), han firmado un convenio marco de cooperación institucional que busca aportar a la consecución de fines comunes para ambas instituciones.
Fortalecer la investigación científica, la producción y generación de insumos académicos y la realización de prácticas pre-profesionales, en beneficio de los estudiantes es un interés compartido entre la Escuela de Derecho de la Universidad Internacional del Ecuador y la Fiscalía General del Estado, los que se resaltan como objetivos dentro del Convenio logrado.
Un auténtico Estado democrático en el que prime la cultura de paz y los derechos humanos solo puede ser producto de una sociedad en la cual todos los actores, a nivel individual, social y político, sean el reflejo de una convicción profunda que esté fundada en el respeto inherente a los demás, la tolerancia, la ética y la justicia.
No cabe duda que la universidad ecuatoriana tiene un rol ineludible y permanente en cuanto al desarrollo del país y la única forma de alcanzarlo a total satisfacción es a través de alianzas estratégicas, con todos los estamentos nacionales, a fin de caminar de la mano en la búsqueda de un futuro mejor. El Estado, el sector privado, la academia y sociedad civil somos aliados en esta tarea y de nuestras acciones dependerá la mejora de nuestro sistema jurídico.