La trinchera de vito
Más cerca del título
De principio a fin. Con 44 puntos en la segunda etapa, Barcelona es líder absoluto de la segunda etapa del campeonato nacional y se perfila para consagrarse como campeón. En este semestre, el conjunto torero solo perdió un partido y empató otros dos, los 14 restantes fueron victorias. Ha consolidado una campaña realmente histórica.
El equipo amarillo exhibe unas cifras arrolladoras durante toda la temporada: 83 goles anotados, 29 triunfos en 39 partidos y siete puntos de ventaja sobre Emelec, que dejan casi sentenciado el título cuando todavía le resta cinco partidos por disputar.
El cuadro torero hizo del estadio Monumental una fortaleza, en la que cedió solo un empate en todo el 2016. El trofeo será el premio justo a la campaña realizada por el DT uruguayo Guillermo Almada y el potencial de jugadores como Damián Díaz, Jonathán Álvez, Marcos Caicedo, Darío Aimar, Matías Oyola, por nombrar a algunos.
Párrafo aparte para Almada. Capaz de lamerse sus propias heridas tras su mal semestre en el 2015. Heredero de la escuela ‘Guardiaolista’ pero lejos de imponerse como un ególatra queriendo borrar lo que ya existía, construyó desde la edificación preexistente. Cambió algunos nombres, le dio nuevas herramientas a los que estaban y armó un equipo que pocas veces hemos tenido en nuestro campeonato.
Como siempre en un deporte colectivo, la influencia de un grupo comprometido resultó tan determinante al punto de transformarse sino en la razón de un resultado, al menos en la explicación más importante y decisiva del mismo. Lo hecho por Barcelona durante este 2016 no sorprende, pero invita a profundizar la idea de generar un conjunto entre jugadores, cuerpo técnico y dirigentes, que sigan la misma línea para la consecución de un objetivo.
Le ganó a todos, aún con partidos por disputar ante Fuerza Amarilla, Independiente, Emelec, Mushuc Runa y Aucas. Es regular, vistoso, sólido y contundente, dejando la sensación de que probablemente lo mejor esté por venir. Demasiados argumentos como para no terminar dando la vuelta olímpica.
Esa estrella 15 también será un galardón a la fidelidad de su hinchada y a una directiva preocupada por sanear las finanzas del club para poder reorganizarlo y treparlo a la cúspide que nunca debió bajar. Barcelona es el mejor. Un poco de cordura y sentido común en la inefable selva del fútbol Ecuatoriano.
Machala es el próximo reto, Fuerza Amarilla es rival. El show está asegurado. El Nueve de mayo volverá a tener una celebración amarilla como alguna vez la tuvo. El querido Ídolo buscará dar otro paso para poder levantar la copa lo más pronto posible. (O)