Los Óscares siguen reacios a otorgar los máximos galardones al género de terror, y al igual que a los géneros fantásticos, optan por premiar a estas cintas en categorías inferiores; este año ¡Huye! (Get Out) no fue la excepción, al llevarse únicamente la estatuilla al Mejor guion original.  Históricamente, El silencio de los Inocentes (Silence of the Lambs) ha sido la única cinta de género de terror en ganar todos los galardones más importantes: Mejor película, Mejor director, Mejor actor y Mejor actriz.

En cuanto a la Mejor película de animación, era casi seguro que la Academia optaría por Coco, debido a su afinidad por las producciones de Disney o Pixar, a pesar de que El pan de la guerra (The Breadwinner) y Loving Vincent podrían darle clases de animación a esta.  Este mismo fenómeno ocurre con el premio a la Mejor canción original, el cual le fue “arrebatado” a Sufjan Stevens por su canción ‘Mystery of Love’, de la cinta Call Me by Your Name, y dado a Kristen Anderson-Lopez y Robert Lopez por Remember Me, de Coco.

El Óscar a Mejor maquillaje lo tuvo bien merecido Kazuhiro Tsuji, David Malinowski y Lucy Sibbick por Las horas más oscuras (Darkest Hour), debido al arduo trabajo que representó dotar de las facciones de Winston Churchill a Gary Oldman, ya que no poseían mayores similitudes.

En cuanto al montaje, la riña estaba entre Dunkerque (Dunkirk) y Yo, Tonya (I, Tonya), siendo la primera la favorita, debido al importante papel que la edición desempeñó dentro de la trama, convirtiéndose en el eje y pieza fundamental de esta.

Con respecto a la categoría de Mejores efectos visuales, la Academia tiende a menospreciar a las súper producciones de ciencia ficción plagadas de robots y extraterrestres y opta por efectos más básicos y que representen situaciones más reales, lo cual convertían a Kong: La Isla Calavera (Kong: Skull Island) y El Planeta de los Simios: La guerra (War for the Planet of the Apes) en las cintas con más probabilidades, ya que, dentro del contexto, son las que más se acercan a lo antes expuesto; aunque la gran sorpresa fue Blade Runner 2049, rompiendo con la tradición antes expuesta. (O)