Apreciados lectores con el mes de agosto, y de acuerdo al calendario publicado por el Consejo Nacional Electoral, se inicia el proceso para que los ciudadanos que han cambiado de domicilio desde las últimas elecciones, puedan notificar su nueva dirección, con miras a que el lugar donde deban votar sea más cercano a su lugar de residencia.

El Ecuador se encuentra próximo a vivir la expresión máxima de la democracia, como es la elección de dignidades para la representación de los poderes ejecutivo y legislativo de nuestro país, por lo que, al amparo del derecho de participación, a la capacidad de elegir y ser elegidos establecida en la Constitución de la República, aún cuenta nuestra ciudadanía con la opción de practicar el cambio de su domicilio al lugar donde efectivamente habita, encuadrando de este modo la aceptación de un mensaje con la identidad del candidato u organización de su simpatía e ideología.

El derecho de participación además de permitir al ciudadano la capacidad de ser elegido y de elegir a sus gobernantes, presenta para todos una gran responsabilidad, como se dice comúnmente, todo derecho conlleva una obligación, en este caso la obligación de asumir la responsabilidad de una buena o mala elección de nuestros gobernantes, quienes nos representarán por el efecto de nuestro voto durante los siguientes años, allí la importancia de estar bien informados no solo en simpatía, sino en ideología, en el sustento de una propuesta seria y viable que permita la correcta representación de las y los ciudadanos.

Según consulta desarrollada en la página web del Consejo Nacional Electoral, el proceso de cambio de domicilio electoral puede efectuarse sin mayor complicación. El trámite es personal y el interesado debe acercarse a la delegación provincial del CNE de su ciudad de residencia, presentar la cédula de identidad y su certificado de votación original, junto con un original de recibo de servicio básico (agua, luz o teléfono, televisión por cable o servicio de Internet).

Con este simple procedimiento, podemos contribuir al engrandecimiento de nuestro país, ejerciendo nuestro derecho al sufragio de un modo responsable y consciente, creando un Estado de responsabilidad y derechos, en respeto de nosotros, de nuestros familiares y amigos, construyendo para todos una verdadera Justicia Social.  

¡Juntos somos invencibles! (O)