El falso documental de Javier Izquierdo, Un secreto en la caja (2016), evidencia la falta de algún escritor ecuatoriano dentro del boom latinoamericano. Retoma un juego entre el chileno José Donoso y el mexicano Carlos Fuentes de mencionar entre sus novelas el rol olvidado de Marcelo Chiriboga entre los protagonistas del boom, corriente creada por la industria editorial en la segunda mitad del siglo XX y que cobró notoriedad al lanzar al mercado, autores y obras hasta hoy fundamentales en la literatura.

Un secreto en la caja usa los recursos del falso documental (mockumentary) donde hechos ficcionales, o un personaje ficcional, como Chiriboga, son presentados como ciertos apoyados por entrevistas y materiales reales. Izquierdo mezcla inteligentemente tales recursos para ahondar en el debate sobre qué origina a Ecuador, cuál es su identidad, qué define a la cultura nacional, etc. Actualizar el juego literario acerca del boom con el protagonismo de un escritor apócrifo implica, si bien, discutir hasta qué punto la literatura ecuatoriana a fines del siglo XX es representativa en lo internacional y sobre todo poner de relieve la pregunta acerca del ser ecuatoriano. Así, Izquierdo cuestiona sobre cómo una región intercultural devino en un país inventado, como si en este existiese un sentimiento “nacional”.

Esta ficción política se ahonda con los regímenes militares y el nacionalismo, más cuando, en el último cuarto de siglo, el petróleo aseguraba la felicidad colectiva. Con la figura de Chiriboga nos damos cuenta de la irrupción de otros rostros del mestizaje que no creen en los proyectos ficticios de regímenes políticos, los que además se imponen como si fueran de largo plazo, “revolucionarios” y que actualizan viejos mitos, haciéndolos pasar como nuevos. La aparición del escritor apócrifo horada la presunción de una historia nacional en continuidad y la necesidad de preguntarse por los vacíos e intersticios producidos por actores ignorados, como los propios literatos, en la construcción de la idea de un país pluricultural contemporáneo. Si el boom latinoamericano fue una producción del mercado,

Un secreto en la caja muestra que todo sistema político y cultural requiere producir mitos para su permanencia. No en vano la película se produjo en la última fase del gobierno anterior; por ello es una lúcida crítica que debe leerse bajo dicho espectro. (I)