Ganar la lotería y no pagar impuestos
Ganarse la lotería y no pagar impuestos, verdaderamente es ganarse la lotería. Ello es posible en el Ecuador. La Ley de Régimen Tributario Interno desde 1989, trae una exoneración del impuesto a la renta a los premios de lotería.
De tal forma que, mientras Juan Pérez quien tiene un trabajo que le demanda entre 8 a diez horas diarias de trabajo, estrés y un gran esfuerzo de capacitarse para mantenerse competitivo, gana al año $200.000 dólares pagará una cuarta parte de lo ganado al fisco por impuesto a la renta.
De otra parte, su vecino ha comprado un entero de la lotería en $10.00 dólares que da un premio de $200.000 dólares, no trabaja, su día transcurre entre ver la televisión, jugar cartas con sus amigos acompañado de unas caipiriñas, tal es su suerte que, además, se gana la lotería¡ y pagará al fisco $0.00 dólares de impuesto a la renta.
La situación de Juan y su vecino para ese año es comparable tributariamente, ambos han aumentado su riqueza en $200.000. Sin embargo, Juan Pérez es penalizado por ser un agente productivo y que genera valor agregado a la sociedad, con relación a su vecino, ya que del dinero obtenido “con el sudor de su frente” pagará $50.000 dólares en impuestos, de los cuales aprovecha su vecino fruto de las obras y servicios que se realizan con los impuestos. Una discriminación injustificada sin duda.
Uno de los cambios en el régimen tributario, ocurre en el año 2008 cuando en la Constitución del Ecuador se incorpora como un principio del régimen tributario, el principio de equidad.
Principio que se relaciona con una adecuada y justa distribución de la carga tributaria hacia los ciudadanos. En el impuesto a la renta la equidad se alcanza en el origen de las rentas para diferenciar su tratamiento, así los países muestran especial sensibilidad sobre las rentas que provienen del trabajo con una carga impositiva más liviana; mientras que en el lado opuesto aquellas rentas producto de una donación o de la lotería la carga tributaria es significativamente mayor, como lo explica el profesor Ernesto Eseverri y lo aplican los países desarrollados.
España tiene impuestos alrededor del 20% del premio, EEUU puede llegar hasta el 40%. Existe aún trabajo por hacer para llegar a un sistema que sea justo y equitativo, tampoco cabe como una finalidad de los tributos fomentar la ludopatía. (O)